Esta web contiene cookies. Al navegar acepta su uso conforme a la legislación vigente Más Información
Sorry, your browser does not support inline SVG

Argentina afronta nuevos pagos sin un peso en el bolsillo

Por Asun LosadaTiempo de lectura2 min
Economía13-12-2002

El ministro de Economía argentino, Roberto Lavgna, asegura que su país no pagará la deuda de 700 millones de dólares que tiene con el Banco Mundial, debido a las lentas negociaciones que tiene el sistema argentino con el Fondo Mundial.

El Gobierno argentino afirmó que no pagará al Banco Mundial su deuda de 726 millones de dólares que ha vencido esta semana. Las consecuencias no se harán esperar: el Banco Mundial cortará el suministro financiero de 2.000 millones que se utilizarían para planes sociales y obras de infraestructura. La causa de este segundo rechazo a pagar, encabezado por el impago de 805 millones de dólares, surgió a partir de las conversaciones del gabinete económico argentino que se queja de la lentitud de las negociaciones con el FMI (Fondo Monetario Internacional). "El vencimiento no se pagó tampoco en noviembre por la falta del acuerdo con el Fondo Monetario" aclaró Lavagna y reseñó que como no había plazos para el acuerdo con el Fondo, \"tampoco hay fechas ni plazos para los pagos de la deuda". "No vamos a pagar", afirmó rotundamente el jefe del gabinete, Alfredo Atanasof, que aclaró que la falta de señales claras de que Argentina llegase a un acuerdo con Fondo Monetario implicaba el impago de la deuda. "No decimos que la culpa de los males sea del Fondo, asumimos como país la responsabilidad, pero lo que decimos es que la burocracia del Fondo ha impulsado políticas que nos han llevado a esta situación" acusó Atanasof que al igual que el presidente, Eduardo Duhalde, pretenden conseguir un acuerdo por el que se posterguen los plazos de pago con todos los organismos multilaterales que venzan hasta diciembre del 2003. La justificación de impago viene a raíz del estancamiento que sufre la economía argentina desde el año 1998, lo que le obligó en su día a instaurar el famoso corralito y bajar los salarios. De momento, parece que el presidente argentino, Eduardo Duhalde, no ha sido capaz de negociar con éxito con el FMI, por lo que el Banco Mundial dejó de enviar préstamos al país desde noviembre del año pasado. Actualmente, el Banco Mundial asegura que tampoco enviará los 2.000 millones de ayudas mientras que no se cumplan los plazos. Este recorte afectará principalmente a las obras públicas provinciales y a los programas de educación y salud.