EMPRESAS

Interrogan a un auditor interno de Parmalat para averiguar dónde está el dinero

Por Raquel Ibáñez2 min

Economía17-01-2004

¿Dónde estará el dinero? Seguramente es lo que se pregunten los investigadores italianos que intentan encontrar miles de millones de euros desaparecidos de las cuentas de Parmalat. Hasta ahora los investigadores sólo han descubierto seis millones de euros.

Ahora le ha tocado el turno a Gianfranco Bocchi, un auditor interno del gigante agroalimentario. Según un informe interrogatorio previo, el auditor dijo a los fiscales que había desobedecido órdenes de un jefe, consistentes en "dar martillazos a su ordenador portátil" para destruir documentos y archivos. Bochi trabajó con la contabilidad de Parmalat durante casi 20 años y es uno de los 10 arrestados, incluyendo al fundador de la empresa, Calisto Tanzi, y a dos ex vicepresidentes financieros de la compañía. Hasta ahora las autoridades no han presentado cargaos formales contra nadie. El pasado jueves, el ministro italiano de Economía, Giulio Tremonti, instó a reformar el sistema de regulación financiera y criticó especialmente al Banco de Italia, dirigido por su rival, Antonio Fazio, por no proteger a los inversores. "El Banco de Italia quizás debió haber advertido en el transcurso de los años, y en el curso de sus inspecciones, por lo menos algo anómalo", dijo Tremonti al Parlamento, al proponer que al banco central se le retiren algunos poderes de supervisión. Por otro lado, el Gobierno italiano aprobó un decreto que prevé una serie de medidas para apoyar a los ganaderos que trabajan como proveedores de leche de Parmalat, golpeados por la crisis del grupo alimentario. El decreto establece unos préstamos garantizados y suspensión por un año del pago de impuestos. El Ejecutivo de Silvio Berlusconi ha extendido los préstamos garantizados a los transportistas de la red de distribución de Parmalat a quienes deben dinero las empresas del grupo alimentario declaradas en administración extraordinaria, según un decreto de urgencia aprobado por el Gobierno para restauración de las grandes empresas insolventes. En Italia, 5.000 ganaderos mantienen créditos con Parmalat por una cifra total que ronda los 120 millones de euros. Estos ganaderos acumulan un retraso en los pagos que alcanza hasta los seis meses. Hace días, tras un encuentro con el ministro de Agricultura, el administrador extraordinario de Parmalat, Enrico Bondi, se comprometió con ellos al pago en 45 días, con el fin de garantizar el suministro.