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Un discurso cargado de pinceladas sociales

Por Raquel Teresa DelgadoTiempo de lectura2 min
España28-12-2003

Feliz Navidad a todos. Como cada Nochebuena el Rey llegó a todos los hogares españoles con sus "mayores deseos de felicidad, paz y prosperidad" para estas fechas, pero este año con un claro encargo: la atención a los más desfavorecidos.

No es la primera vez que el Rey Juan Carlos se despide en su mensaje de Navidad mencionando a "los extranjeros residentes en España", pero sí se podría decir que en el discurso de este año ha tenido una especial sensibilidad con los inmigrantes y otros colectivos desfavorecidos como los enfermos o los discapacitados. Manteniendo como telón de fondo la defensa de los valores, reglas, principios y el espíritu integrador de nuestra Constitución, el monarca apeló a la solidaridad y la responsabilidad de los españoles para con los inmigrantes que han encontrado en "nuestro país un nuevo hogar" en el que trabajan contribuyendo al crecimiento de todos. También condenó a las mafias que intervienen en los viajes de estos inmigrantes y les explotan una vez llegados a España. "Debemos mejorar las condiciones de vida de todos", añadió. Otra de las preocupaciones que transmitió el monarca al final de este Año Europeo de la Discapacidad fue la plena integración de los discapacitados mediante el trabajo desde todos los niveles de la administración y de la sociedad por la igualdad de las personas con alguna minusvalía física, psíquica o sensorial. Como en una carta a los reyes magos, D. Juan Carlos pidió atención, respeto, compañía y comprensión para los ancianos, "a los que tanto debemos", y solidaridad para las víctimas de los abusos y malos tratos así como con las víctimas del terrorismo y sus familias. Consciente de que estas fechas se vivirán con dolor en los hogares que recuerden a un familiar asesinado, aseguró: "Nunca les podremos olvidar". La "España labrada con esfuerzo por nuestros antepasados" requiere del trabajo de todos y pasa por una mejora de la protección social y la cobertura sanitaria, del empleo, de la educación y de la vivienda. Gracias a esto y a la Constitución, hablamos de "España como un país de progreso", ha asegurado el rey.