Esta web contiene cookies. Al navegar acepta su uso conforme a la legislación vigente Más Información
Sorry, your browser does not support inline SVG

Israel intenta liquidar al líder de Hamás

Por Salvador MartínezTiempo de lectura2 min
Internacional07-09-2003

La bomba explotó tiempo después de haber impactado en el objetivo: la casa de un amigo, según el fundador de Hamás o, según el Ejército de Israel, un centro de operaciones terroristas. La no causó muertos pero sí varios heridos.

El jeque Yasín anunció como respuesta a la tentativa israelí que había dado la orden a sus unidades de prepararse para “golpear a todo el enemigo por todos los medios”. El propio Yasín resumió qué hará que el brazo militar de Hamás consiga “que el enemigo -Israel- pague caro este intento criminal”. Por su parte, un responsable israelí dejaba claro que tienen “la intención de liquidar todo Hamás, sin hacer distinciones entre el brazo político y el militar”. Saúl Mofaz, ministro de Defensa israelí, declaró el pasado martes de un modo menos explícito que es necesario “reforzar la presión sobre Hamás”. No es nada halagüeño para la población palestina, puesto que Hamás se ha convertido en una opción más del espectro político palestino. La eficacia y sus ayudas sociales y de caridad hacen de Hamás “una alternativa política, social, militar e ideológica” al actual régimen, según Ziad Abou Amr, ministro de Cultura de la ANP. Esa efectividad no parece estar presente en los negociadores para la paz en el conflicto israelí-palestino y en lo que respecta a la parte palestina, el partido del premier palestino: Al Fatah. Los últimos sondeos de popularidad muestran que Hamás y Al Fatah se encuentran al mimo nivel. Y es en esta situación, tras 130 días en el cargo, en la que el primer ministro palestino, Abu Mazén, ha presentado su dimisión. Aunque es probable que Mazen lidere un nuevo gobierno a designar, según fuentes parlamentarias palestinas, los allegados al primer ministro dimisionario creen que no aceptará volver al cargo. En la vida política palestina, de momento, sobran las suposiciones. Casi tanto como la violencia desatada, y la que todavía se puede producir. Al terminar la pasada semana, la radio pública israelí hacía saber que todo líder o activista de Hamás o Yihad Islámica están condenado a muerte. Por supuesto, sin juicio.