Argumentos y artimañas de Atutxa y el PNV para evitar la sentencia
Por Noelia Hernández Martín2 min
España12-06-2003
Un grupo parlamentario ilegalizado por apoyar y financiar a asesinos, un nacionalismo que actúa con artimañas ilegítimas y una sentencia que cumplir. Estos son los ingredientes de un venenoso caldo de cultivo cocinado en el Parlamento vasco. El Tribunal Supremo (TS) dio el pasado día siete un ultimátum a la Mesa de la Cámara vasca para que disolviera al brazo político de ETA en el Parlamento, Sozialista Abertzaleak (SA). De lo contrario, actuaría judicialmente por un delito de desobediencia.
De esta forma, el presidente de la Cámara vasca se vio acorralado por la justicia. Juan María Atutxa intentó esquivar el auto del TS y evitar así la culpa judicial. Para ello, presentó un proyecto de disolución de SA. Su partido, el PNV, y EA dieron el visto bueno a este documento para su tramitación. Todo hacía presuponer que SA tenía los días contados en el Parlamento. Sin embargo, los mismos que votaron a favor del documento y SA impedían un día después en la Junta de Portavoces la aprobación del informe. Atutxa remitía así el pasado lunes una carta al TS donde explicaba su supuesta incapacidad para disolver al brazo político de ETA en el Parlamento. En la misiva, detalla al presidente del alto Tribunal, Francisco Hernando, los pasos desarrollados para dar cumplimiento a su providencia, así como el rechazo de los representantes parlamentarios vascos a su propuesta. Con el objetivo de respaldar sus argumentos, Atutxa ha acompañado el escrito con informe que confeccionaron los servicios jurídicos de la Cámara en la que se aseguraba que el auto "invade y menoscaba" la autonomía de organización y funcionamiento del legislativo. El Parlamento vasco asegura que la sentencia del TS invade sus competencias. Sin embargo, y a pesar de que el PSE había solicitado que adjuntara también las actas de las reuniones de la Mesa del parlamento vasco y de la Junta de portavoces en las que se votó y discutió el asunto, Atutxa reconoció el jueves que no había procedido así, haciendo caso omiso a la petición de los socialistas. El PSE tomó la decisión de enviar al Tribunal Supremo y a la Fiscalía General del Estado dichas actas con objeto de que para que "conozcan con detalle" la posición que ha mantenido cada grupo en torno al cumplimiento del auto de disolución, de cara a las futuras actuaciones legales contra quienes se han opuesto a ella. En la misiva, Atutxa explica que, a pesar de su convencimiento en que la Justicia ha invadido competencias del parlamento vasco, la Presidencia de la Cámara vasca ha intentado poner en marcha procedimientos "para tratar de resolver el problema" aunque, finalmente, "se impuso la autonomía del Parlamento". Sin embargo, lo cierto es que el TS no ha aceptado las argumentaciones de Atutxa y tomará medidas para que se disuelva al grupo parlamentario SA.