GUGGENHEIM
El Barroco más moderno
Por Roberto González García2 min
Cultura02-10-2002
Rubens y su época, los tesoros del Ermitage muestra, alrededor de la pintura de Rubens, su influencia en Van Dyck, Jordaens y otros discípulos, junto a la orfebrería, las tallas en marfil, los tapices y las joyas que rodearon su trabajo. Todos estas obras maestras del arte europeo fueron acumuladas por Catalina la Grande de Rusia para demostrar la prosperidad de la Rusia del siglo XVIII, y ocuparán, hasta el próximo mes de febrero las salas del Museo Guggenheim de Bilbao.
La exposición es el resultado de la alianza firmada hace dos años por la Fundación Guggenheim y el Ermitage. El director del museo ruso, Mijaíl Piotrovski, defendió la interrelación de las pinacotecas históricas con los museos nacidos para coleccionar arte del siglo XX. "El arte contemporáneo necesita de los maestros antiguos. Queremos que la gente lo entienda así", dijo Piotrovski. De esta manera, se consigue una mayor comprensión del Arte, al poder ver juntas dos etapas tan diferenciadas y, a la vez, complementarias. La exposición está organizada en áreas temáticas alegoría y mitología, religión, retratos, pintura de género y paisajes, documentando documenta el barroco flamenco, un momento de extraordinaria creación artística, con Rubens como impulsor y maestro de otros muchos pintores. Es la primera vez que se exponen en Europa estas ciento cincuenta obras del barroco flamenco que constituyen la parte más importante del patrimonio del Museo Ermitage de San Petersburgo. Fueron reunidas por el museo estatal ruso y por la Art Gallery de Ontario, para una exposición que realizaron en Canadá el verano de 2001. La zarina Catalina la Grande impulsó a mediados del siglo XVIII la creación del museo Ermitage en San Petersburgo. La colección nació dotada con dos centenares de lienzos y hoy llega a los tres millones de piezas que recorren la historia del arte mundial desde la prehistoria. Sólo el 5por ciento de sus fondos se exponen en unos 50.000 metros cuadrados de galerías. "El Ermitage quiere mostrar lo que tiene en otras partes del mundo", afirmó Susan Davison, comisaria de la exposición del Guggenheim. La organización de exposiciones fuera de Rusia se ha convertido en los últimos años en una importante fuente de ingresos para el museo, que en parte compensan los recortes de las ayudas públicas. Una selección de sus colecciones se exhiben en el Guggenheim de Las Vegas.