Oriente Próximo

Exhuman el cadáver de Arafat para ver si hubo envenenamiento

Por Irene Hernández1 min

Internacional27-11-2012

Los restos de expresidente palestinos han sido desenterrados con el objetivo de aclarar si falleció a causa de un envenenamiento de polonio, tal y como apuntan investigadores suizos. Varios grupos de expertos forenses analizarán ahora el cuero del dirigente, fallecido en 2004. Algunos de sus familiares se han mostrado contrarios a la exhumación del cadáver.

A petición de la Autoridad Palestina, en el proceso de exhumación han colaborado forenses franceses además de expertos rusos y suizos. El tribunal francés ha encomendado a la Fiscalía palestina que obtenga todas las pruebas posibles para la investigación después de que el caso se abriera el pasad mes de agosto. Un instituto suizo reveló que había descubierto en la ropa del dirigente palestino altos niveles de polonio 210. A raíz de ahí un tribunal galo comenzó una investigación sobre el fallecimiento de Arafat. Cada equipo de investigadores adquirirá sus propios resultados, que después compartirán con las autoridades palestinas. A partir de ahí saldrán las conclusiones definitivas del estudio. No obstante, estas podrían demorarse hasta la primavera del año que viene, según explican fuentes próximas a la investigación. La viuda del dirigente palestino, Suha, respalda la exhumación ya que está convencida que esta hará posible que se conozca la verdad. Sin embargo, otros familiares se muestran radicalmente en contra de esta acción. “No hay justificación", la familia "conoce la verdad y la decimos abiertamente: nuestro líder, nuestro fundador fue asesinado con veneno por Israel", declara Naser al Kidwa, sobrino y alto cargo del movimiento Al Fatá. Yasir Arafat fue presidente de la Autoridad palestina, fundador del movimiento Al Fatá y líder de las guerrillas palestinas. Fue considerado un traidor por los grupos radicales por aceptar en la década de los 70 la existencia de Israel. Además, Arafat negoció los Acuerdos de Madrid y de Oslo en los años 90, la iniciativa más clara de paz a la que estuvieron a punto de llegar Israel y los Territorios Ocupados Palestinos. Su cuerpo permanecía enterrado en la sede de la Presidencia desde que falleciera en noviembre de 2004 a los 75 años. Después de la investigación, volverá a ser enterrado allí en un funeral militar.