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Arrastrada por la crisis argentina, la Bolsa española cede cerca de un 5% en una semana

Por Ana Romero VicenteTiempo de lectura3 min
Economía14-12-2001

La jornada cerró el pasado viernes con los peores resultados desde los mínimos que se dieron tras los atentados del 11 de septiembre en EE.UU. La crisis argentina provocó, en gran medida, que el Ibex 35 no pudiera superar, y ni siquiera mantener, los 8.300 puntos obtenidos anteriormente; así, tuvo que cerrar con 8.281, es decir, cedió un 0,6 por ciento.

Las noticias macroeconómicas y empresariales que provienen tanto de Europa como de EE.UU. son muy malas, y esto afecta directamente sobre las bolsas de ambos continentes, que cerraron a la baja la semana pasada. El Ibex 35 perdió un 4,84 por ciento, con lo que acumula un retroceso cercano al uno por ciento en lo que llevamos de mes. El desánimo de compra de los inversores españoles se acentuó cuando el Banco Central Europeo anunció la rebaja de sus previsiones de crecimiento en la zona euro. Cree que el estancamiento del consumo y la reducción de inversiones provocarán que el Producto Interior Bruto se reduzca hasta el 0,7 por ciento. Pero los principales causantes de que la Bolsa en España cerrara a la baja fueron las empresas y bancos españoles con grandes inversiones en Argentina. La crisis que actualmente vive esta economía afecta de forma directa sobre ellas y el riesgo de inversión es, por tanto, demasiado alto. Así, Telefónica perdió un 7,2 por ciento; Santander Central Hispano un 4,8 por ciento; BBVA cedió un 5,9 por ciento, e Inditex (que engloba las tiendas de Zara, Máximo Dutti, etc.) se dejó más de un 10 por cierto, a pesar de que la empresa ha hecho público un excelente beneficio neto, que en sus últimos nueve meses de ejercicio (febrero-octubre) ha crecido un 31 por ciento: facturó un 24 por ciento más que durante el mismo periodo del año 2000. Sólo Iberdrola y Red Eléctrica cerraron con alzas. La inestabilidad en Argentina parece no tener fin. Aunque parte de su deuda pública fue pagada el viernes, aún está vigente la "virtual" suspensión de pagos (como la denomina Domingo Cavallo, ministro de Economía) que afecta a los salarios de miles de trabajadores y sobre los fondos de inversores y ahorradores. Además, siguen en marcha las medidas que limitan la obtención de dinero en efectivo a 1.000 pesos por persona y mes. Ahora, todo el mundo está pendiente del próximo movimiento de Gobierno argentino, que no parece decidirse en devaluar el peso o dolarizar la economía, como medidas para salir del hoyo en el que están desde hace ya cuatro años. Los malos datos provenientes de EE.UU. también colaboraron en esta reducción del índice español. Wall Street abrió el viernes con tendencias bajistas, sobre todo su indicador de valores tecnológicos, Nasdaq, por lo que su homólogo español, Ibex Nuevos Mercados, cerró de igual manera. Y todo esto como consecuencia de los atentados del 11 de septiembre: desde entonces, la producción industrial de aquel país ha sufrido una fuerte disminución (y casi toda la europea también), ha provocado una avalancha de despidos y el consumo se sigue retrayendo, a pesar de que la Reserva Federal ha vuelto a bajar los tipos de interés. Además, muchas empresas estadounidenses ya están adelantando que sus beneficios para el cuarto trimestre del año, serán a la baja (profit warning). Con estos resultados, no sería extraño, confirman los analistas, que volvieran a darse en la Bolsa española cifras similares a las de la semana pasada.