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PAÍS VASCO

Los ertzainas dispondrán de más chalecos antibalas, coches blindados y ayuda psicológica

Por Cristobal Cabezas MartínTiempo de lectura1 min
España02-12-2001

Con la reunión entre los sindicatos de la Ertzaintza y el responsable de Interior del Gobierno vasco, Javier Balza, éste decidió reforzar a la Policía autónoma vasca de más y mejores materiales, como son los nuevos chalecos antibalas, o vehículos policiales blindados. El consejero de Interior decidió suspender también el Egunsentia.

Este sistema recogía las actuaciones policiales diarias que efectuaba la Ertzaintza. Sin embargo, Balza ha desestimado su uso por "no introducir una clave de seguridad" para los agentes. La decisión forma parte del acuerdo entre el Departamento de Interior y los sindicatos. Balza destacó el carácter "estructural" de un pacto que obligará a invertir como mínimo 5.000 millones más. A continuación, añadió que la Policía autónoma vasca seguirá desarrollando "todos" los servicios policiales; el departamento de Interior analizará cómo se llevan a cabo dichas tareas. Los sindicatos se mostraron satisfechos ante el acuerdo conseguido ya que cumple con el objetivo de la reunión, que era alcanzar "más cotas de seguridad" y corregir los "déficits" en torno a la seguridad de la Ertzaintza. El acuerdo contempla una serie de criterios sobre la dotación de más medios materiales y técnicos para los ertzainas, cursos de formación y auto protección y también ayudas de "carácter personal". Todas las actuaciones rutinarias quedarán limitadas o serán apoyadas por otra patrulla cuando esta segunda patrulla no tenga que atender un incidente. Asimismo, el secretario general de los socialistas, Nicolás Redondo, pidió un emplazamiento al Gobierno vasco para que ponga en marcha dentro de la Ertzaintza una unidad de delitos monetarios con el objetivo de investigar las fuentes de investigación de ETA. El líder del PSOE-EE (Partido Socialista Obrero Español- Euskadiko Ezquerra) argumentó que el País Vasco cuenta con dos "especifidades" que posibilitarían las medidas contra la financiación de ETA: una de ellas sería la existencia de una policía propia; la otra, poseer una capacidad fiscal autónoma. Redondo-Terreros precisó que el punto crucial de su propuesta es investigar "esos circuitos formales y serios que fortalecen al nacionalismo radical".