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El Día Mundial del sida pide un compromiso internacional auténtico

Por Covadonga de la Cuesta1 min

Sociedad01-12-2001

El mundo entero aplaudió de forma unánime la propuesta de Koffi Annan, secretario general de las Naciones Unidas, de crear un Fondo Global para combatir el sida. Los países desarrollados prometieron conjuntamente recaudar 9.000 millones de dólares, cantidad necesaria para frenar el goteo de muertes en un 20 por ciento. Apenas se ha reunido un 10 por ciento de lo acordado.

La epidemia del sida 2001 es el nombre del informe publicado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y Onusida. Las cifras recogidas en el informe continúan siendo "alarmantes", especialmente en África, donde el sida es la primera causa de mortalidad. El virus de inmunodeficiencia humana (VIH) golpea con mazo de hierro a la población africana y se ha cobrado 2,6 millones de vidas en 2001. El sida cumple 20 años y su salud se fortalece cebándose especialmente con el Tercer Mundo y los países en vías de desarrollo. Su trayectoria es vertiginosa: 60 millones de personas contagiadas, de las que ya sólo quedan 40 millones. El 70 por ciento de esa cifra vive en el África subsahariana. Pero el informe presentado también extiende la voz de alarma a otras zonas. Europa Oriental ha sido escenario de un contagio masivo en los últimos años. El 0,5 por ciento de los adultos es seropositivo. Se ha pedido un mayor compromiso internacional. No basta con romper el silencio, hay que pasar a la acción. Así reza el lema de varias ONG concentradas frente al Congreso de los Diputados de Madrid con motivo del Día Mundial del Sida. Explicaron que las medidas preventivas son muy importantes y deben fomentarse, pero no debe dejarse de lado la política paliativa que aliviará el sufrimiento de los millones de contagiados en todo el mundo. El Ministerio de Sanidad y Consumo español ha tomado la iniciativa de poner en marcha en el 2002 un registro nacional donde figurarán de forma anónima y codificada todos los seropositivos. Francisco Parras, secretario general del Plan Nacional de Sida, considera que este registro "permitirá detectar posibles cambios en la evolución de la epidemia, en los que reorientar las estrategias de prevención o planificación de los recursos".