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Las empresas españolas reducen hasta un 12% sus beneficios

Por Lourdes Sánchez GilTiempo de lectura2 min
Economía28-11-2001

Los beneficios de las empresas españolas se han visto reducidos a un 11,9 por ciento hasta septiembre, por culpa del menor crecimiento de la economía mundial. Según los datos de la Central de Balances del Banco de España, la actividad empresarial más afectada ha sido la manufacturera, que ha visto como hasta septiembre de este año ha descendido un seis por ciento en la generación del valor.

Las empresas españolas no son invulnerables a la desaceleración mundial y se puede comprobar en los datos que dio la semana pasada la Central de Balances del Banco de España. Hasta septiembre de este año, las empresas no financieras se han visto perjudicadas por la desaceleración de la actividad económica, y por tanto el beneficio de las compañías se ha visto perjudicado. En el mismo periodo del año 2000, el beneficio era de un 21 por ciento, pero este año los datos ofrecidos por el Banco de España muestran que el beneficio es de tan solo el 11,9 por ciento. José Luis Malo de Molina, director del servicio de estudios del Banco de España, señaló que el crecimiento del valor añadido bruto de la actividad empresarial es casi la mitad que el año anterior, ya que en este año ha aumentado el 4,8 por ciento frente al ocho por ciento del 2000. Según Malo de Molina, "las razones de esta ralentización se explican en la menor aportación de la demanda externa, en la desaceleración de la demanda interna y en el sesgo negativo producido por la caída de los precios del petróleo en las compañías del sector". Aunque, sin duda, el sector más afectado y con resultados más malos ha sido el manufacturero. Malo de Molina calificó de "abrupta desaceleración" la que sufren las empresas manufactureras, ya que en el 2000 esta actividad creció el 22 por ciento y este año, hasta septiembre, ha descendido en un seis por ciento. Esto se debe, obviamente, a la caída de la inversión y del consumo, pero sobre todo a los precios del petróleo. El único sector que vive un momento expansivo es el comercial. El sector de transportes ha ajustado los costes y el sector de las comunicaciones está lanzando nuevos productos, en el caso de las telecomunicaciones. Esto muestra que no todas las compañías se han visto afectadas por el menor crecimiento de la actividad empresarial.