CONVENCIÓN PP

Zapatero: “Ni yo merezco tanto, ni los españoles tan poco”

Por Antonio Pérez Vicente4 min

España05-03-2006

El PSOE ha tratado de contrarrestar la fuerza mediática de la convención del PP con actos como el celebrado el pasado domingo en Valladolid. En él, el presidente del Gobierno criticó a la oposición por no preocuparse por los ciudadanos. Sus compañeros de partido siguieron la misma senda. Según José Blanco, secretario de Organización del PSOE "Si Aznar no rompió España, no la va a romper nadie".

En lo único que parece coincidir el PP y el PSOE es en la crítica al adversario. Los populares no trataron de disimular su descontento con el Gobierno y aprovecharon la convención para poner al Ejecutivo de Zapatero en el centro de la diana política, pero en el PSOE no se quedaron cortos. Mientras el portavoz socialista en el Congreso, Alfredo Pérez-Rubalcaba, auguró que el partido de Rajoy “fracasará en su enésimo viaje al centro”, el líder de los socialistas, José Luis Rodríguez Zapatero, llegó más allá en un mitin celebrado en Valladolid. El discurso empezó más tranquilo, contraponiendo las políticas sociales aprobadas por el Gobierno en los últimos días con las palabras pronunciadas por los líderes del PP en la convención: “El mismo día que empezaba la convención del PP, con las viejas políticas y las viejas falsedades que hemos escuchado, nosotros aprobábamos leyes nuevas con derechos nuevos como la igualdad plena entre hombres y mujeres” que, a su juicio, es señal de “progreso” y “justicia”. Además de la Ley de igualdad, Zapatero hizo referencia a la de Dependencia. Del mismo modo, el presidente intentó quitar hierro a una de las bazas más importantes de la oposición: el modelo territorial. Por eso manifestó que “la reforma de los estatutos no debilita, sino que fortalece al Estado” y, en ese sentido, predijo que los miembros del PP, en el futuro, “se abrazarán a las reformas de los estatutos como se han abrazado a todas las reformas que combatieron en su día”. Del mismo modo, criticó duramente al PP porque, en su opinión, “hacen una convención y prácticamente no hablan de los ciudadanos, hablan de nosotros [los socialistas] y, sobre todo hablan de mí”. El jefe del Ejecutivo trató de poner la guinda al pastel sentenciando: “Ni yo merezco tanto, ni los españoles tan poco”. Antes del discurso de Zapatero, otros destacados miembros socialistas habían ido allanando el terreno para tratar de deslucir la puesta de largo de la oposición. Entre ellos, José Blanco, secretario de Organización del PSOE. En respuesta a las palabras de Aznar en el acto de inauguración, Blanco apuntó que si “Aznar no rompió España, no la va a romper nadie”. Además, el socialista bromeó con el eslogan de la convención al afirmar que hablan de futuro con “dos promesas, dos chicos con gran futuro como Aznar y Fraga”. También citó a Rajoy, Acebes y Zaplana como “campeones de la modernidad”. Duelo de expresidentes Por otra parte, también recibieron con desagrado el discurso del expresidente Aznar sobre la política antiterrorista del Gobierno. Según Aznar, durante su mandato no se produjo ninguna negociación con ETA, sino que “sólo se fue a comprobar una cosa: si estaban o no dispuestos a rendirse”. El también expresidente Felipe González le reprochó en tono irónico que, en tal caso, “para no negociar, se podría haber ahorrado llamar a la banda Movimiento de Liberación Nacional Vasco, que todavía lo padecemos internacionalmente porque nunca nadie les dio tal legitimidad, todo el mundo les llamó banda terrorista”. En ese sentido se manifestó también Josu Jon Imaz, del Partido Nacionalista Vasco, al afirmar en una entrevista en RNE que Aznar “mintió descaradamente” y que no sólo negoció, sino que “modificó su política penitenciaria dentro de aquel proceso de paz”. Desde Izquierda Unida, su coordinador general, Gaspar Llamazares, pidió la desclasificación de los documentos sobre las conversaciones que mantuvo el Ejecutivo de Aznar con ETA mientras que el representante de ERC en el Congreso, Joan Puigcercós, ha subrayado que Aznar “mintió con las armas de destrucción masiva” al igual que miente al negar “que negociara con ETA”. También el coordinador ejecutivo del BNG: Francisco Jonquera, tildó como “el señor de las mentiras” al expresidente por sus palabras sobre la inexistencia de una negociación con la banda terrorista en 1998. En un tono más conciliador, el ministro de Defensa, José Bono, consideró que Aznar “debería ser más prudente” y anunció que le gustaría ver en el PP a “un adversario electoral” en el que encontrar “comprensión y apoyo”. De una manera mucho más distendida, el titular de Defensa había criticado anteriormente también al PP en un viaje oficial a Javier (Navarra), relacionando a la oposición con el Altísimo: “Hay gente que cree que Dios tiene el carné del PP, pero eso no es verdad”, declaró.