TENIS

Sin sorpresas en Australia

Por Juan Diego Gómez2 min

Deportes25-01-2004

Tras las tres primeras rondas, camino de la cuarta, los candidatos al triunfo en el Abierto de Australia siguen adelante. Habrá, además, varios duelos de altos vuelos: los más inmediatos, los que enfrenten a Andy Roddick y Marat Safin, por un lado, y al suizo Roger Federer contra el australiano Lleyton Hewitt, por otro.

El número uno del pasado año, Andy Roddick, viene implacable y no deja lugar a dudas de que es uno de los favoritos. Andre Agassi también está demostrando que, a pesar de sus 34 años, sigue siendo un placer verlo jugar: con 250 partidos de Grand Slam a sus espaldas. El héroe local, Lleyton Hewitt, parece recuperado de la grave crisis de juego que sufrió el pasado año, y este año puede volver a convertirse, con su garra, en número uno del mundo. El de Adelaida fue el verdugo en tercera ronda de una de las grandes opciones españolas, el joven Rafael Nadal, en un partido en el que el mallorquín le puso las cosas dificiles. Tampoco que perder de vista al ruso Marat Safin, resurgido en el torneo. A estas alturas, sin embargo, la única opción de los españoles pasa por la raqueta de Juan Carlos Ferrero, que a pesar de que la pista rápida nunca fue su fuerte, está demostrando en Australia que ha mejorado ostensiblemente. El de Onteniente supo reponerse a la lesión de espalda que sufrió en el partido de segunda ronda, contra el italiano Filippo Volandri. Aunque antes de comenzar el Grand Slam la gran baza de los españoles era el también mallorquín Carles Moyà, pero una inesperada lesión contra Hewitt en el torneo de Sídney truncó sus planes. Moyà se quejó de que la organización no quisiera aplazar un día su partido contra el estadounidense James Blake, aunque en su enfado, atacó -injustificadamente- al trato preferencial que, según él, se da a las dos figuras del torneo, Hewitt y Agassi. En el cuadro femenino destaca la figura de Justine Henin, sin duda alguna la gran favorita a alzarse con su tercer grande, tras los conseguidos el pasado año en Roland Garros y el US Open. Su compatriota Kim Clijsters se presume como su gran rival, máxime después de la eliminación de la estadounidense Venus Williams -tercera cabeza de serie- a manos de su compatriota Lisa Raymond. La francesa Amélie Mauresmo, verdugo de Anabel Medina en tercera ronda, junto con las estadounidenses Lindsay Davenport y Raymond, así como Anastasia Myskina, última representante de la Armada rusa, son las únicas que podrían hacer saltar la sorpresa en Australia. La actuación de las españolas fue desalentadora: tan sólo Virginia Ruano y Anabel Medina pasaron la primera ronda.