ANÁLISIS DE SOCIEDAD
Ejemplo
Por Almudena Hernández
1 min
Sociedad12-06-2013
Estos tiempos de crisis son una gran escuela. Se aprenden lecciones por doquier: afloran los amigos amigos de verdad, la familia recupera su protagonismo y se descubre la importancia de las cosas pequeñas. Estos tiempos son los de dar ejemplo a unas generaciones que quizás no tengan tantas oportunidades como las que tuvimos nosotros sin mover un dedo. Es momento de elegir entre la consola y un juego de mesa, entre una fiesta de bolas y una celebración casera, entre la comida rápida y el hecho a mano. Quienes no hemos sabido -o no hemos querido- renunciar a todo eso lo tenemos más complicado. Seremos los eternos frustrados del planeta, los ciudadanos malhumorados, las gentes del todo vale, principios a un lado. En los últimos días el Gobierno español ha lanzado un globo sonda para tantear a la opinión pública. Se ha planteado multar a los padres de aquellos adolescentes que acaben reiteradamente en las urgencias de un hospital con un coma etílico. Y se ha dicho de todo. Parece que para el común de la sociedad sirve el todo vale. "¿Quién no se ha emborrachado alguna vez? ¿Quién no se ha fumado nunca un porro?", dicen demasiados. Y quien cuenta uno... Ya se sabe que el hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra. Dos veces, o más. Si no, no estaríamos tratando de salir a flote de esta crisis. Por eso, quienes vienen detrás necesitan un guía para no confundirse de camino. Una brújula con cuatro puntos bien claros. Un ejemplo ¿Algún voluntario?
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Almudena Hernández
Doctora en Periodismo
Diez años en información social
Las personas, por encima de todo