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FÚTBOL

Tres Copas en diez años

Por Manuel RosalesTiempo de lectura3 min
Deportes17-03-2004

El Real Zaragoza volvió a demostrar en Montjuïc, contra un cansado Real Madrid, que es el rey de la Copa en la última década. Tres títulos en diez años, de los seis que acumula, así lo confirman.

Fue el partido que todo aficionado del Zaragoza soñó, pues acabó en un final apoteósico, digno de dos grandes equipos. El Zaragoza dio una gran alegría a su afición y tumbó al Madrid en una final que tuvo de todo. El entrenador maño, Víctor Muñoz, reconoció que ganar en la prórroga, habiendo jugado durante muchos minutos con un hombre menos, hacía que la victoria supiera mejor. El presidente del Zaragoza, Alfonso Solans, afirmó que su equipo “se vistió de David y derrotó a Goliat”. Solans, criticado en las últimas temporadas, afirmó que sólo con ver cómo ha apoyado la afición maña, mereció la pena la final y todo lo que ha sufrido su equipo esta temporada. También anunció que el club ofrecerá la Copa a la Virgen del Pilar, pero más adelante, en memoria de las víctimas de los atentados de Madrid. En el Real Madrid, mientras, se notaron las caras de desolación y tristeza, con un vestuario hundido, que ve cómo se le vuelve a escapar la Copa del Rey, tras la derrota de hace dos temporadas contra el Deportivo. Carlos Queiroz indicó que su equipo tuvo más oportunidades de gol, pero que el Zaragoza tuvo más acierto en el remate y se alzó con el título. El portugués señaló que su equipo se vio desgastado por llevar el peso del partido, especialmente cuando su oponente se quedó en inferioridad. Raúl reconoció que el Zaragoza se mereció la victoria. El presidente del club, Florentino Pérez, encajó con deportividad la derrota –que le impide optar a lograr la triple corona– y reconoció que el Zaragoza fue justo vencedor. También reconoció que la Copa no es una competición que sonría a los intereses merengues, ya que en toda su historia ha perdido 20 finales. Esta temporada, la Copa del Rey no estuvo marcado por grandes sorpresas, en relación con los grandes que cayeron eliminados en las eliminatorias a partido único. La segunda ronda tan sólo dejó en la cuneta al Athletic de Bilbao. En la siguiente se quedó el campeón, el Mallorca, y por poco no lo hizo el Real Madrid. En octavos de final, el partido estrella fue el del Atlético de Madrid contra el Deportivo, que trajo consigo la eliminación de los gallegos. Pero el espectáculo puro de la Copa llegó en cuartos, con una eliminatoria entre Madrid y Valencia que ganaron los blancos con rotundidad y desplegando un gran fútbol. El Barcelona, en cambio, dijo adiós contra un Zaragoza entonces en horas bajas. Las semifinales trajeron consigo el partido del morbo y de los incidentes entre Sevilla y Madrid, por un lado, mientras que el Alavés, el único de Segunda, se quedó a las puertas de conseguir la machada de llegar a la final.