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BALONCESTO

Baskonia, el mejor de una Copa de alto nivel

Por Paco SánchezTiempo de lectura2 min
Deportes29-02-2004

La Copa del Rey de 2004 resultó ser una de las más disputadas y vibrantes de los últimos tiempos. El Baskonia confirmó el porqué de su liderato en la ACB mientras que el Barcelona, Pamesa Valencia y Real Madrid fueron las cruces del torneo. El Joventut resurgió de la mano de Aíto García Reneses y Rudy Fernández.

Amén del Joventut, el único hueso con que tropezó el Baskonia en su camino hacia la final resultó ser el Estudiantes, que llegaba en un buen momento en la ACB y, de la mano de Felipe Reyes, plantó cara a los campeones, a los que puso muy difícil su paso a las semifinales. Como a lo largo de todo el campeonato, el triunfo vitoriano se cimentó en su excelente defensa y cómo no, en su tridente mágico: el Chapu Nocioni, Luis Scola y Arvydas Macijauskas. El Barça se resintió en semifinales y demostró que no es el equipo imbatible que consiguió la triple corona la temporada pasada, al caer contra sus vecinos badaloneses, a pesar de la excelente actuación de Navarro, que jugó con un dedo roto. Clave también fue la ausencia de Gregor Fucka, que no pudo suplir el danés Cristian Drejer. Ya en la primera jornada de cuartos de final quedó clara la igualdad que iba a reinar a lo largo de la Copa: el Joventut, que llegó a la cita sevillana en el último momento, sin contar en la lista de favoritos, pasó apuros para deshacerse del Manresa, al que acabó imponiéndose por 90-87. La clave del triunfo badalonés se cimentó en la solidez de su bloque y los destellos de la más inmediata promesa del baloncesto español, Rudy Fernández, que fue elegido MVP de la competición. El Manresa se despedía sin pena ni gloria, y sobre todo, con la sensación de desperdiciado una magnífica oportunidad para haberse colocado entre los cuatro primeros, pues perdió en la prórroga. Más igualado aún estuvo el duelo entre Barcelona y Madrid, que se decantó del lado blaugrana merced a la excelente actuación de la Bomba Navarro y los propios errores de su rival. El Madrid, que mostró su mejoría en defensa y se batió con dignidad contra los de Svetilav Pesic, no remató la faena y acusó en exceso la dependencia en ataque del base Elmer Bennett y el poste letón Kaspars Kambala. Los anfitriones del Caja San Fernando dieron la gran sorpresa al dejar fuera, en su primer enfrentamiento, a uno de los favoritos al título, el Pamesa Valencia. Los hombres de Gustavo Aranzana desplegaron un gran partido y maniataron a su rival, mientras los aleros Matthew Santangelo y Donatas Slanina se erigían como héroes merced a su acierto anotador. Lo único destacable de un decepcionante conjunto taronja fue la actuación del argentino Fabricio Oberto. Pero la victoria local, fruto de la ilusión, no impidió que quedara patente su menor potencial con respecto a los demás aspirantes, ya que en semifinales quedaron emparejados con el equipo de Dusko Ivanovic, que les pasó por encima.