IRAQ

El sargento primero José Antonio Bernal, asesinado en Bagdad

Por Isabel A. Vega2 min

Internacional11-10-2003

Según un comunicado de la Oficina de Información Diplomática (OID) José Antonio Bernal fue tiroteado la mañana del pasado jueves en la entrada de su domicilio en Bagdad. Los agresores llamaron previamente a la puerta y esperaron a ser recibidos para disparar.

José Antonio Bernal trabajaba como agregado de información de la Embajada de España en Iraq. En concreto, dependía del Centro Nacional de Inteligencia, CNI, los servicios secretos militares españoles. Era sargento primero del Ejército del Aire y desempeñaba sus funciones en Bagdad desde hacía dos años. Según contaban algunos testigos, tres individuos se bajaron de un vehículo Opel de color negro y se dirigieron al domicilio de Bernal, quien les dejó entrar en la casa, quizá porque le eran conocidos. Tras intercambiar algunas frases, el militar español corrió a la calle y fue perseguido por los agresores, que iban armados con pistolas, supuestamente de calibre 9. José Antonio tropezó y cayó al suelo. En ese momento abrieron fuego contra él y acto seguido emprendieron la huida. Ana Palacio, ministra de Asuntos Exteriores, afirmó que existen indicios de que Bernal conocía a quienes le mataron. En la misma línea se pronunció en un comunicado la OID, que basándose en los datos facilitados por el servicio de seguridad local contratado para vigilar la zona, informó de que el militar español “pareció reconocer, en el momento de abrir la puerta, a algunas de las personas que se presentaron en su residencia”. “Tras unos primeros instantes de confusión en los que mediaron un breve intercambio de frases y algún forcejeo, los agresores abrieron fuego sobre José Antonio Bernal”, precisa el texto. El secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Ramón Gil-Casares, declaró que este atentado supone un “paso cualitativo” respecto al sucedido el pasado mes de agosto contra la sede de la ONU en Bagdad, cuando resultó muerto el Capitán de Navío Manuel Martín-Oar, pues en este caso y por primera vez, se produce un atentado contra un español en el que “efectivamente han ido a por él”. El cadáver de Bernal ya ha sido repatriado a España. Tenía 30 años, estaba casado, y deja una hija de tres años de edad.