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MEDIO AMBIENTE

El incendio de Moguer, próximo a Doñana, ya está perimetrado

Por Luis ArtolaTiempo de lectura5 min
Sociedad26-06-2017

Las llamas de los focos activos que han sofocado durante este fin de semana la zona próxima al parque de Doñana, en Huelva, están perimetradas en su totalidad. La Guardia Civil e Infoca han comenzado las investigaciones para aclarar las causas del siniestro, entre las que no se descarta el factor humano. Aún quedan unas 400 personas reubicadas en distintos pabellones. La disminución del viento y de las temperaturas en las últimas horas han permitido trabajar mejor a favor de la extinción del fuego.

Este fin de semana se ha declarado el primer incendio de la época estival en España. El fuego tiene como foco principal La Peñuela de Moguera, en la provincia de Huelva y muy próximo al Espacio Natural de Doñana. La noche del sábado el siniestro forzó el desalojo de más de 2,000 personas, muchas de ellas habían ido a pasar el fin de semana y, el domingo ya existían tres epicentros muy activos del paraje.

En el momento de declararse el incendio, en un área eminentemente agrícola y agreste, había rachas de viento que han llegado a alcanzar los 90 kilómetros por hora y han hecho más complicado el control del siniestro. Existen fuertes sospechas por parte de las autoridades y expertos en el tema que en esta nueva catástrofe natural se encuentra la mano del hombre. El incendio produce un enorme daño a la actividad económica de la zona.

Pero no solo eso. Además, la naturaleza y su equilibrio, una vez más, están amenazados. Y esto porque existe gran riesgo de afectación del declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. De momento, se ha sabido que las llamas, en parte de este espacio protegido, han puesto en peligro el lugar destinado a la reproducción en cautividad del lince ibérico de El Acebuche y se han logrado sacar los 14 animales del centro.

El necesario recolocamiento de esta importante especie en grave riesgo de extinción se ha producido asimismo en aquellas personas que viven en la zona así como a numerosos turistas alojados, entre otros lugares, en los camping Doñana y Cuesta de la Barca así como cientos de trabajadores de los invernaderos afectados. Para todos ellos se han habilitado varios pabellones durante estos días.

Este domingo se ha podido dominar mejor el incendio dado el menor viento que azotaba la zona y que había favorecido la propagación de las llamas. No obstante, a mediodía se ha vuelto a producir el refuerzo de la catástrofe, con un importante despliegue de medios técnicos y humanos, ante la vuelta de una mayor viveza del aire. Previamente se habían producido refuerzos aéreos para sofocar el incendio, tanto del Gobierno andaluz como del central, con 14 autobombas y cuatro aviones de carga en tierra. En total, se calcula que unos 550 profesionales trabajan para extinguir completamente las llamas.

Desde el Infoca, como se denomina al servicio andaluz de extinción, han explicado que "hay vientos rolantes con rachas fortísimas. Los equipos están acotando el perímetro, pero ellos van a un kilómetro por hora y el fuego avanza a tres o cuatro". También manifestaba el director operativo de este organismo, Juan Sánchez, que el incendio se dirige en todas las direcciones ante el efecto "ventilador" creado. De hecho, solo en cinco horas, la propagación de las llamas quemó 12 kilómetros.

Además, otro experto en medioambiente trasladado al epicentro ha declarado que ni siquiera las carreteras han podido actuar como "cortafuegos" del espacio natural. Una de las principales amenazas del fuego es la posible afectación de los núcleos de población próximos, considerada la prioridad de los esfuerzos de los agentes.

La tarde del domingo no ha sido mejor ya que por mayor seguridad se han cortado varias carreteras, entre ellas las circundantes a Matalascañas lo que, por otro lado, ha dejado atrapadas a unas 50,000 personas aunque durante la noche se ha reabierto uno de los accesos y la mañana de este lunes ya permanecen abiertos en su totalidad. Ante el miedo y las consecuentes aglomeraciones que pudiera causar el incendio en la población, la Junta de Andalucía ha pedido calma a la población.

El presidente del Consejo de Participación de Doñana, Miguel Delibes, ha manifestado con clara preocupación, aunque prudente en las declaraciones sobre el efecto de la catástrofe en el espacio protegido, que "todo se junta para que el incendio tenga aires de catástrofe". Para colaborar en las labores de decisión, algunos de los representantes del Ejecutivo, como Juan Ignacio Zoido, ministro del Interior y Fátima Báñez, titular de Empleo, han acudido a la zona.

Asimismo, los consejeros de Medio Ambiente, José Fiscal y de Justicia e Interior, Rosa Aguilar, han valorado las posibles causas del incendio en el que no se excluye "el factor humano", al igual que ha declarado la presidenta de la Junta, Susana Díaz. Este lunes aún existen muestras del fatal acontecimiento forestal que comienza a dar tregua, con miles de pinos quemados y dejando un rastro negro alrededor de la carretera que comunica las localidades de Mazarrón y Matalascañas.

De hecho, aún se encuentran fuera de sus viviendas un millar de vecinos. De todas formas, desde el Infoca se muestran esperanzados, a pesar de los posibles cambios meteorológicos que podrían empeorar la extensión del incendio. La actividad de dos de los tres focos principales, como el oeste, cercano a Matalascañas y el este, el Parador de Mazagón, se encuentra controlada después de que finalmente los agentes hayan podido rodear el dinamismo de las llamas, de forma que se eviten nuevas expansiones. En el punto más cercano a Doñana, el norte, aún no está perimetrado pero se espera se acote durante la jornada, ya que se está trabajando "a destajo con la UME (unidades militares)".

También las previsiones del tiempo dan un respiro a los especialistas, ya que se espera menos calor y rachas menores de viento. Hasta el momento, se ha podido conocer que el fuego no ha penetrado en las más de 100,000 hectáreas que componen el parque nacional de Doñana. Lo que aún no se sabe es el número de hectáreas de la zona afectadas por las llamas. En cuanto al inicio de las investigaciones, se espera que expertos del Infoca junto al Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil y activos de la Policía Nacional desplegados en Andalucía estudien minuciosamente el terreno para aclarar las causas del siniestro.

La presidenta andaluza ha vuelto este lunes al punto de origen de las tareas principales, desde Mazagón, para conocer nuevos detalles del incendio. Desde ahí ha declarado, contundente, que "vamos a llegar al límite para saber qué ha pasado aquí y por qué se ha producido este incendio, vamos a exigir que se depuren responsabilidades al máximo". En la misma línea, el ministro Zoido ha afirmado que "lo importante es trabajar para sofocar el incendio primero, estabilizarlo después y empezar a analizar cuáles han sido las causas". Asimismo, aboga por una rápida valoración de los daños para su inmediata reparación.