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CATALUÑA

Junts pel Sí y la CUP ceden para evitar unas nuevas elecciones

Por Jesús EspinosaTiempo de lectura2 min
España10-01-2016

Junts pel Sí y la CUP han llegado a un acuerdo para investir de president de Carles Puigdemont y apartar a Mas. Lo más importante de dicha negociación ha sido que JxSí ha tenido que apartar a Artur Mas, que ha dejado de ser candidato a la Generalitat en favor del alcalde de Gerona. La explicación es sencilla: unas nuevas elecciones en marzo habrían perjudicado el proceso secesionista.

La CUP ha salido ganando a medias de su pulso con Junts pel Sí. El proceso independentista seguirá adelante pero la formación anticapitalista ha prescindido prácticamente de su grupo parlamentario puesto que le cederá a algunos de sus diputados a Junts pel Sí para que la mayoría en el Parlamento sea holgada. “La CUP asume que dos de sus diputados actuarán conjuntamente en las tomas de posición” de Junts pel Sí”, reza el segundo punto del documento. Es decir, que Junts pel Sí gozará de su grupo más los diputados de la CUP para tener mayoría absoluta para aprobar cualquier nuevo desafío al Estado.

Además, la CUP se ha comprometido a no votar nunca durante esta legislatura en sintonía con los grupos parlamentarios contrarios al proceso independentista y al derecho a decidir, es decir, si toda la oposición vota no a cualquier Ley del Gobierno catalán, la CUP solo podría abstenerse.

Por otra parte, el acuerdo también deja patente los errores cometidos por la CUP durante la negociación y es la propia formación antisistema la que los asume. Y por eso, algunos de sus parlamentarios contrarios a la investidura dimitirán y entrarán otros nuevos.

“La CUP pone a disposición del acuerdo el compromiso de renovar, tanto como sea necesario, el propio grupo parlamentario con el objetivo de visualizar un cambio de etapa y asumir la parte de autocrítica que le corresponde en la gestión del proceso negociador”, reza el punto quinto.

La independencia en 18 meses

A partir de ahora, el Govern catalán queda constituido con Carles Puigdemont a la cabeza y el líder de ERC, Oriol Junqueras, como vicepresidente del mismo. Esta semana será crucial para el anuncio del resto de puestos del Ejecutivo catalán.

El camino a seguir ahora por el Gobierno catalán se ciñe a la hoja de ruta por la independencia aprobada por Junts pel Sí y la CUP antes de que se produjeran sus negociaciones para investir a un presidente. Esa hoja estipula que en un plazo máximo de 18 meses Cataluña deberá proclamar la independencia.

Antes, sin embargo, se deben aprobar una serie de leyes prioritarias como la constitución de una Hacienda catalana o un Banco Central Catalán, como se estaba especulando desde CDC. Además, se aprobará también durante los primeros días de Gobierno una Ley de emergencia social porque fue un requisito indispensable por parte de la CUP.