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Osama Bin Laden

El amor a su mujer y la preocupación por su familia, el lado más humano del terrorista

Por Jesús EspinosaTiempo de lectura3 min
Internacional23-05-2015

Debido a las informaciones publicadas por el periodista Symour Hersh que apuntaban a que el Gobierno de Estados Unidos habría mentido sobre su versión de la muerte de Osama bin Laden, la Casa Blanca ha desclasificado una serie de documentos para poder corroborar su versión. En ese proceso se han hecho públicos documentos de los más variopintos, y muchos de ellos dejan entrever el lado más humano del terrorista como por ejemplo una carta de amor enviada a su pareja o su biblioteca.

"Mi última voluntad”" era el título de la misiva que el terrorista islámico envió a su “"querida y fiel esposa”", como así se refiere a ella. “"¿Cómo estás?"”, comenzaba el escrito. Una carta que ahora se puede conocer ya que el Gobierno americano la ha sacado a la luz. Curiosamente, también iba dirigida tanto a su hijo Osama como a sus dos hijas Asma y Duha. Al igual que, posiblemente, a su hermana Iman y al resto de sus parientes. "Pido a Dios que todos estéis en buenas condiciones y que acelere vuestra liberación y la de todos los prisioneros muyahidin y os lleve a las orillas de la seguridad", rezaba una de las partes de la misma.

En esa carta el líder de Al Qaeda dejaba vislumbrar una preocupación que padecía por si su cautiverio provocaba una especie de “crisis psicológico” a su familia. Hay que recordar que el líder musulmán estuvo escondido años y años prácticamente sin ver la luz del sol. Sin embargo, después se volvía a poner romántico: "Quiero que sepas que llenas mi corazón

de amor y hermosos recuerdos como los de tu capacidad de aguantar tensiones para tranquilizarme, o tu amabilidad hacia mí. Cada vez que pienso en tí, se me llenan los ojos de lágrimas por tenerte lejos".

Más de una vez Bin Laden juró amor eterno a su pareja y advirtió de que no se casaría de nuevo ya que no encontraría una mujer como ella y, por eso, permanecería en “la tierra de la yihad” hasta que Dios les uniera y pudiera verle tanto a ellas como a sus hijos. Así lo escribía el terrorista en su carta. También se podía ver cómo Bin Laden buscaba de alguna manera compensarla "por todo el amor que se ha perdido” durante el cautiverio. De hecho, para él si en este mundo no se podía llegar a esa paz entre los dos tendría que llegar pero en el más allá.

Ávido lector

Por otro lado, y además de la carta, en el material desclasificado también se dejaba ver la biblioteca del terrorista; formada por más de 103 documentos traducidos al inglés y con el que Osama Bin Laden pasaba horas y horas leyendo. Era de esperar que si estaba recluido, la lectura fuera su principal pasatiempo. Lo más sorprendente sin duda de esas biblioteca eran los libros en francés. Hasta 19 títulos en ese idioma que dejaban ver la intención de Bin Laden de atacar a la economía francesa con la esperanza de generar un colapso internacional. El libro “¿Causó Francia la Gran Depresión?”, encontrado en la biblioteca, es una prueba que respalda esa hipótesis.

Por último, y no menos importante, otro de los documentos desclasificados ha sido el cuestionario de Al Qaeda. Un folio en donde los aspirantes a terroristas debían rellenar y contestar una serie de preguntas sobre qué querían hacer dentro de la organización. “¿Desea ejecutar una operación suicida?” o “’por favor, introduzca la información requerida con exactitud y veracidad. Escriba de manera clara y legible. Nombre, edad, estado civil”.