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DERECHOS HUMANOS

Joaquín José renuncia a una indemnización millonaria

Por Covadonga de la CuestaTiempo de lectura1 min
Sociedad07-06-2002

El caso de Joaquín José alentó a otros tres españoles condenados a la pena de muerte. Julio Mora, un canario de 75 años, cumple condena por el asesinato de un antiguo jefe y de su abogada. La defensa justifica que el suceso se produjo en defensa propia y Mora, además de parapléjico y de que varios informes le consideran incapaz psicológicamente, había ingerido varios medicamentos.

Pablo Ibar espera la muerte al serle imputado un triple asesinato ocurrido en 1994. El caso de Joe animó a la familia de Ibar a contratar a Raben por 180 millones de pesetas. Un vídeo borroso, pruebas de ADN y huellas que no pertenecen al acusado recuerdan mucho al caso de Joaquín José. Ibar posee una página web propia donde se describe su caso y en la que se facilita información de cómo ayudarle. El más olvidado de los tres es sin duda el español de origen sirio Nabil Nanakli Kasebaty, condenado a ser fusilado en Yemen por conspirar contra el ministro de Asuntos Exteriores del país. En Yemen sólo hay un corresponsal español, el único que puede informar del caso de Nabil. Todos ellos esperan librarse del corredor de la muerte como hace un año ocurrió con Joaquín José. El apoyo de su familia, que reunió más de mil millones de pesetas para pagar al abogado Peter Raben, la ayuda española y de asociaciones como Amnistía Internacional y finalmente, la falta de pruebas incriminatorias absolvieron en Tampa (Florida) a Joe. Ahora, ha rechazado una indemnización para no volver a estar nunca más frente a un tribunal.