EDITORES
La AEDE advierte de la crisis de la prensa
Por Elena Villegas
2 min
Comunicación18-04-2002
El año 2001 no fue el mejor para la prensa española, si bien la evolución desde 1990 es ascendente. Las amenazas que, contra ella, ve la AEDE, son el bajo índice de lectura, los periódicos digitales y la prensa gratuita.
La prensa diaria española lleva 18 meses sumida en una de “sus peores crisis desde la II Guerra Mundial”, tal y como anunció Alfonso de Salas, presidente de Unidad Editorial y ex presidente de AEDE (Asociación de Editores de Diarios Españoles). Esta dificultad que atraviesa la prensa es consecuencia directa del descenso de ingresos por publicidad –de un diez por ciento durante el 2001-, fruto, a su vez, de la recesión económica desde el 11 de septiembre; a esto, hay que unir que ha disminuido el número de lectores en 150.000. Esta información está reflejada en El Libro Blanco de la prensa diaria, presentado, en Madrid, el 17 de abril, por José Sanclemente, presidente actual de AEDE. Pese a que el informe advierte del grave bache económico, presenta una evolución favorable de la prensa diaria en la década de los 90. Durante este período, la difusión creció un once por ciento y el número de lectores, un 55 por ciento. Aún así, la difusión, de 106 ejemplares por cada 1.000 habitantes, no alcanza la media europea, de 212, y queda tan sólo por encima de Italia, Portugal y Grecia, con la paradoja de que es el segundo país de Europa en el que se editan más periódicos. La AEDE propone, para contrarrestar el bajo índice de penetración, un Plan Nacional de Fomento de la Lectura, que desarrollaría en colaboración con el Ministerio de Educación y Cultura. Un obstáculo a este proyecto representan, según De Salas, los periódicos digitales y los diarios gratuitos; a estos últimos denominó “folletos publi-informativos” por practicar competencia desleal en lo referente a publicidad. El Libro Blanco de la prensa diaria, elaborado por IESE (Instituto de Estudios Superiores de Empresa) y Andersen España, analiza el sector desde el punto de vista de contenidos, empresarial, tecnológico, ético y legislativo. A este primer volumen seguirán otros, pues es de periodicidad anual. La conclusión de Alfonso de Salas respecto a los medios impresos es que han contribuido a la democratización y modernización de España.