ESPAÑA-VENEZUELA
Moratinos expresa su confianza en Chávez para fomentar lazos empresariales
Por Esteban del Pozo2 min
España29-07-2009
Rodeado de las empresas españolas más importantes de España como Repsol YPF, Iberdrola o Telefónica. Así es como Moratinos realizó su viaje por América Latina para fomentar acuerdos económicos entre estos gigantes de las finanzas y Venezuela y Brasil. El ministro de Exteriores quiso encabezar la delegación española en el foro empresarial hispano-venezolano y aprovechar la ocasión para “apuntalar” las relaciones bilaterales entre estos dos países.
Lo más destacado de este viaje son los contratos, varios de ellos de gran envergadura, que algunas instituciones han firmado con el país gobernado por Hugo Chávez. España quiere ser quien produzca el cambio tecnológico que necesita Venezuela para explotar al máximo todos sus recursos naturales. Para ello ofrece la ayuda de las entidades españolas más conocidas a nivel mundial. Las más importantes tienen que ver con el ámbito energético y de las telecomunicaciones. Uno de ellos ha sido el pacto entre Iberdrola y Elecnor, para construir una planta de ciclo combinado. Otro, quizá el más relevante, es el que concretó Repsol para participar en la exploración en la Faja del Orinoco, la mayor reserva de crudo del mundo. Esta medida se enmarca en el acuerdo de cooperación energética tomada entre ambos países el año pasado. Este convenio va a permitir al Gobierno español comprar petróleo venezolano a un mejor precio, a cambio de tecnología para proyectos de desarrollo del país sudamericano. Pero además de energía y telecomunicaciones España ofreció su ayuda en otros sectores como el de las infraestructuras, el ferroviario, el naval o el turismo. También el bancario ocupó su cuota de protagonismo, ya que entre la veintena de empresarios que fueron con Moratinos se encontraban representantes del Banco Santander. Esta entidad compró a principios de este mes al Gobierno de Chávez su filial, el Banco de Venezuela, por 750 millones de euros. La política, aunque en un segundo plano, estuvo muy presente durante la estancia de los españoles en Venezuela. El afianzamiento de las buenas relaciones entre Venezuela y España y la colaboración estrecha entre los dos Gobiernos fue el otro pilar del viaje. El apoyo de España a Chávez en el exterior es el precio que el Gobierno español está dispuesto a pagar para alcanzar estos acuerdos económicos. El mejor de los ejemplos es el apoyo que Moratinos expresó a Chávez por su conducta en el conflicto hondureño. En este, Hugo Chávez se ha volcado para que el presidente destituido, Manuel Zelaya, vuelva al poder. También se mostró de acuerdo con las medidas que el Gobierno venezolano está tomando y dijo estar confiado en “la Venezuela del presente y el futuro”, ofreciendo su deseo de mantener una "relación profunda, sincera y respetuosa" con el Gobierno de Hugo Chávez. Respecto a los acuerdos alcanzados el titular de Exteriores situó a Venezuela como una “apuesta estratégica” con nuevas inversiones en sectores como el de la energía, las infraestructuras, las finanzas o el turismo. Las palabras de elogio no sólo llegaron desde la silla española ya que el homólogo de Moratinos, Nicolás Maduro, consideró “exitoso” el camino recorrido junto a España y abogó por “elevar la calidad y cantidad” de los programas en marcha y de otros futuros, en beneficio también del proceso de desarrollo de la región. “Venezuela está hoy en el epicentro de un proceso revolucionario que está creando una nueva situación”, manifestó.