MEDICINA

Menores al quirófano y bebés por catálogo, lo último en ¬estética¬

Por Tamara Santos2 min

Sociedad05-03-2009

Un bisturí, un pintalabios, "medicina cosmética"... Cada vez parece haber menos diferencias. Lo importante es conseguir la perfección, ser un escaparate atractivo en un mundo lleno de espejos. Esta es la mentalidad del siglo XXI, de los nuevos avances, de la ciencia y la tecnología, de los hombres que juegan a ser dioses.

"Lo importante es el interior, la belleza se lleva por dentro". Frases como esta se escapan de la realidad mientras miles de menores deciden pasar por quirófano para someterse a una cirugía estética. Según la Sociedad Española de Cirugía Plástica y Reconstructiva, sólo en la Comunidad Valenciana anualmente 1.500 jóvenes se someten a este tipo de operaciones, el 10 por ciento de los pacientes que deciden acudir. Cada vez son más adolescentes, alrededor de los 15 años de edad, quienes solicitan estos servicios, siendo el aumento de pecho y cambio de nariz las asistencias más demandadas. Esta comunidad no es la única en la se produce este fenómeno, cada vez hay más menores decididos a meterse en el quirófano para mejorar su imagen. Por esta razón, la asociación el Defensor del Paciente en Sevilla ha catalogado de insuficiente el decreto que regula este tipo de operaciones estéticas. Entre sus argumentos, sostiene que un psicólogo no puede saber en una sola consulta si un menor tiene realmente la necesidad de someterse a una operación, tal y como se hace actualmente. Otro motivo es que a pesar de disponer de buenas clínicas o cirujanos, estos no se hacen responsables de las consecuencias que podrían suponer a un joven este tipo de experiencias. Por todo ello, la asociación solicita más control en los centros especializados y la prohibición por ley a los menores de someterse a la cirugía estética. El interés por la apariencia ha llegado a tal extremo, que un bebé puede nacer al gusto de su madre, como ya suelen llamarlo, a la carta. En Estados Unidos, la clínica de fertilidad Fertility Institutes posibilita la elección de embriones libres. Lo que comenzó siendo un avance para rechazar genes asociados a posibles enfermedades se ha convertido en un menú para madres deseosas de tener un bonito bebé. Como si de escoger un muñeco se tratase, los padres ya pueden elegir el color de ojos de su futuro hijo o el tono de su pelo. El proceso es similar a otros de reproducción asistida y el método se ha extendido con el nombre de diagnóstico genético preimplantacional. La clínica ya ha anunciado que este proyecto de "medicina cosmética", tal y como lo llamó uno de los doctores, se podrá llevar a cabo dentro de poco en los centros de Los Ángeles y Nueva York.