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NOMBRAMIENTO

La RAE acoge a Inés Fernández- Ordóñez como la cuarta mujer académica

Por Tamara García MartínezTiempo de lectura1 min
Cultura18-12-2008

Doctora en Filología Hispánica por la Universidad Autónoma de Madrid y catedrática de Lengua Española en esta misma institución, Inés Fernández-Ordóñez es ya académica de la Lengua. La Real Academia Española (RAE) recibe con satisfacción este nuevo nombramiento, que fue apoyado por 16 académicos de los 33 que tienen derecho al voto. Además de los 46 asientos que posee la institución para sus académicos, sólo tres estaban ocupados por mujeres.

El suyo será el asiento “P” mayúscula el que ocupará la nueva incorporación de “La Casa de la Lengua”. Era la única que se había presentado para cubrir la vacante del poeta Ángel González tras su fallecimiento y su candidatura fue propuesta por José Antonio Pascual, Margarita Salas, y Álvaro Pombo. Fernández-Ordóñez (Madrid, 1961) es autora del monumental Corpus Oral y Sonoro del Español Rural (COSER), un trabajo en el que ha invertido -hasta la fecha- casi mil horas en recoger testimonios orales en 721 pueblos y pedanías del norte, centro y sur peninsular. Voces, expresiones, coloquialismos, localismos, que sin esta búsqueda y rastreo desaparecerían en muy pocos años. Es una apasionada del lenguaje popular y castizo, considera que la lengua es “un fenómeno cambiante que se encuentra en perpetua metamorfosis” y que no puede regirse mediante “criterios dogmáticos de corrección o incorrección”. Domina cuatro idiomas (inglés, alemán, francés e italiano) y es una experta en las variaciones gramaticales del español, concretamente de los leísmos, laísmos y loísmos. Seguidora de Ramón Menéndez Pidal la académica es además especialista en historia y lenguaje de nuestro siglo XIII, concretamente del reinado de Alfonso X el Sabio. “En la historia de la Academia se han sentado sólo cinco mujeres, pero ninguna filóloga”, resaltó Inés Fernández-Ordóñez, quien confesó que para un filólogo, ser elegido parte de la Academia es un “enorme honor” y “para mí resulta especialmente emocionante; es una distinción que no sé si merezco”, reconoció la nueva académica.