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BOLIVIA

El proceso autonomista de Santa Cruz culmina en una consulta contra Morales

Fotografía
Por Miguel MartorellTiempo de lectura2 min
Internacional11-05-2008

Un referéndum sobre la revocación del mandato del presidente de Bolivia, Evo Morales. Este es el resultado de la crisis política que vive el país más pobre de Latinoamérica desde hace meses, como respuesta al proceso constituyente iniciado por Morales. La autonomía lograda por la región de Santa Cruz en un referéndum ha puesto contra las cuerdas al presidente de Bolivia, quien ha decidido someter su mandato a una consulta popular.

El referéndum de la región de Santa Cruz se saldó con un 85,61 por ciento a favor del “sí” y un 14,39 por ciento a favor del “no”. Con un 34,4 por ciento de abstención, quizá lo más remarcable de esa consulta en la región más rica de Bolivia sea las decenas de heridos que dejaron los enfrentamientos entre los partidarios del referéndum y los simpatizantes del Gobierno central. La autonomía de Santa Cruz abre la puerta para que otras tres regiones -Beni, Pando y Tarija- que forman parte de la llamada media luna boliviana convoquen sendas consultas populares. El referéndum sobre la autonomía se ha convertido en la punta de lanza de los opositores al proyecto constitucional de Morales. Sin embargo, el presidente boliviano considera el referéndum de Santa Cruz un fracaso por su alta abstención y trata de evitar que aumente la tensión convocando a los gobernadores de las regiones rebeldes al diálogo. La Iglesia, que se había ofrecido como mediadora, ha sido descartada por el Gobierno, después de que el cardenal boliviano participara en la consulta. En este clima de tensión, la oposición a Morales -que controla el Senado- ha rescatado de las Cortes la propuesta de convocar una consulta sobre la revocación del mandato del presidente y los nueve gobernadores regionales. Esta propuesta, presentada en diciembre a la Cámara de los Diputados, permaneció atascada en el Senado, oculta por el proceso constituyente. La voluntad de Morales de ver reforzada su posición por el pueblo, llevó a su partido, el Movimiento Al Socialismo (MAS) a aprobar el referéndum en el Senado. A juicio del presidente, esta consulta servirá para solucionar la tensa situación que vive el país "en las urnas y no con violencia", por lo que se ha comprometido a su convocatoria "inmediata". En dicha consulta se preguntará a los bolivianos si están de acuerdo con la continuidad de Morales y su nueva Constitución. Para que el mandato del presidente quede revocado, el “no” en esta consulta debe superar el apoyo que obtuvo Morales en las pasadas elecciones, tanto en porcentaje como en número de votos. Así, para que la consulta resulte efectiva contra Morales, el “no” debe obtener un apoyo superior al 53,7 por ciento que obtuvo el presidente en las elecciones de 2005 y a los 1.544.374 votos. De ser así, el Gobierno deberá convocar elecciones generales en un plazo de tres a seis meses y someterse al designio de los votantes.