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SALUD

El caso de Chantal Sèbire reabre la polémica sobre la eutanasia

Por Paula LópezTiempo de lectura2 min
Sociedad21-03-2008

Sólo dos países de los veinticinco de la Unión Europea, Holanda y Bélgica, disponen de una legislación que acepta la eutanasia activa. Ésta se produce a través de una actuación directa sobre el enfermo provocándole la muerte, que no se habría producido de manera inmediata sin esa intervención.

Eutanasia significa etimológicamente "buena muerte". Eso es lo que pretendía Chantal Sèbire, alegando que no quería seguir sufriendo. La prática de la eutanasia en Europa recibe un trato diferente en los diferentes países de la Unión. Holanda fue la pionera en probar el homicidio médico en el año 2001; Bélgica aprobó la legislación definitiva en el 2002. Los casos de Francia, Italia, Alemania e Inglaterra se asemejan más a la situación española: la eutanasia activa esá penada aunque, en el caso de Italia y Alemania, se pueden alegar como principios atenuantes la caridad o humanidad. En Suiza, sin embargo, no está penalizada si se realiza con fines altruistas y humanitarios. A pesar de ser un manera de terminar con la vida, la Iglesia dio una aparente luz verde a su uso. Pio XII, en 1957, se mostró favorable y consideró lícitamente moral utilizar tratamientos que alivien el sufrimiento, aunque precipiten la muerte del enfermo. Las leyes españolas no mencionan en ningún momento el término "eutanasia", ya que la considera homicidio aunque se cometa por compasión o para evitar el dolor. Entre los argumentos a favor más comunes se encuentran el sufrimiento o dolor del enfermo, la carga que puede representar para su familia y el hecho de que no debería de prologarse una vida que no merezca ser continuada. En contra, está el hecho de que se trata de una decisión totalmente irreversible y la duda de si el paciente posea la capacidad suficiente de valorar su propia decisión. El caso de Chantal Sèbire ha reabierto la polémica de la eutanasia en Francia. La mujer padecía cáncer en la cara y había solicitado a la justicia francesa la muerte a través de este método. Apareció el miércoles 19 muerta en su casa, pero no está claro si de muerte natural o con ayuda. La fallecida quería beneficiarse del suicidio médico asistido, pero su petición había sido rechazada.