GIBRALTAR

Londres, dispuesto a ceder Gibraltar a España

Por María Fernández Riveras2 min

España25-11-2001

El encuentro entre el ministro de Exteriores español, Josep Piqué, y su homólogo británico, Jack Straw no ha dado los resultados esperados. Se ha tratado, a grandes rasgos, de un diálogo de sordos. Mientras Piqué luchaba por recuperar la sobernía de Gibraltar y se negaba rotundamente a aceptar la autodeterminación de Gibraltar, Straw ha mantenido que un cambio de soberanía tendría que ser apoyada por los gibraltareños.

De esta forma, no ha quedado muy claro si esta reunión, celebrada en Barcelona, ha servido para dar un paso adelante en el contencioso de Gibraltar. La atmósfera de "socios y aliados" que había creado la reunión entre Blair y Aznar el pasado día 9 no ha servido de mucho. El Gobierno británico se ha comprometido a convencer a los gibraltareños de los beneficios que les reportaría un cambio de soberanía pero insiste en que la colonia seguirá siendo británica mientras así lo deseen los llanitos. Por su parte, el ministro principal de Gibraltar, Peter Caruana, ha descartado la posibilidad de que el Gobierno y la población del Peñón acepten una disminución de su soberanía. "No existe posibilidad alguna de que Gibraltar pueda aceptar una transferencia de soberanía o una soberanía compartida y tampoco la creación de comités anglosajones que den voz a España en nuestros asuntos", declaró Caruana que fue el gran ausente de la reunión del pasado día 20. El ministro de Gibraltar ha advertido que sólo acudirá a futuras reuniones bajo la fórmula de "dos banderas, tres voces", un modelo que España rechaza porque considera que el futuro de Gibraltar deben decidirlo únicamente los dos Estados que firmaron el Tratado de Utrecht de 1713. Otro obstáculo importante es la Constitución gibraltareña de 1969, que recoge en su preámbulo que "el Gobierno de Su Majestad nunca suscribirá acuerdos por los que el pueblo de Gibraltar pase a la soberanía de otro Estado en contra de su voluntad" A pesar de sus diferencias, ambos dirigentes han coincidido en afirmar que su propósito "es concluir un acuerdo global en torno al verano del próximo año. Este acuerdo cubrirá todos los temas importantes incluidos los de cooperación y soberanía". Piqué ha anunciado que la próxima negociación a nivel ministerial se celebrará en enero.