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ISRAEL

El Gobierno israelí se prepara para el éxito de Hamas en las elecciones

Por Salva Martínez MásTiempo de lectura2 min
Internacional22-01-2006

El centro político israelí encarnado en los miembros del partido Kadima, así como los representantes mayoritarios de la izquierda y derecha de la política en Israel, Partido Laborista y Likud, respectivamente, toman posiciones a la luz de los previsibles resultados de las elecciones legislativas palestinas.

La inminente situación política palestina parece difícil de aceptar para gran parte de los responsables políticos israelíes. La recién nombrada ministra de Exteriores en funciones, Tzipi Livni, se pronunciaba taxativa ante el hecho de que Hamas parta casi como favorita en las elecciones legislativas palestinas de esta semana. “No hay democracia en un mundo en el que se permite a una organización terrorista participar en las elecciones”, dijo la semana pasada. Livni, se pronuncia en la misma línea que su predecesor en el Ministerio de Exteriores israelí, Silvan Shalom. Como buen miembro del Likud que es, Shalom dijo en su día que una victoria de Hamas en las elecciones legislativas enviará el conflicto palestino-israelí a la misma situación que hace 50 años. Efectivamente, Livni y el Likud –al que ésta debe su currículo político- entienden que los islamistas del autodenominado “movimiento de resistencia islámica” no deben participar de la vida política palestina. Sin embargo, nada está más lejos de la realidad, porque Hamas no es sólo su brazo armado, las brigadas Al Qassam, la facción responsable de parte de los peores atentados de la segunda intifada. De hecho, Hamas ganó con una mayoría considerable las elecciones municipales celebradas a finales de 2005. El optimismo despertado por esos resultados no excluye la posibilidad de la que tanto se habla en los círculos islamistas: que Hamas se haga con la mitad de los 132 diputados que forman el poder legislativo palestino. Por su parte, los laboristas israelíes que lidera Amir Peretz se dicen dispuestos a negociar con una Autoridad Nacional Palestina (ANP) formada también por miembros islamistas. Mientras tanto, sea cual sea la posición de los partidos israelíes respecto de Hamas, la violencia continúa. El jueves pasado, un atentado del que se responsabilizó la organización terrorista, Yihad Islámica, hería a una veintena de personas en Tel Aviv. Sólo murió el suicida que hizo estallar la carga explosiva que transportaba. Tenía 21 años. Al final de la semana pasada, comenzaron las represalias de la aviación israelí. Así, en mitad de lo que el arzobispo y premio Nóbel de la paz, Desmond Tutu, llama “espiral sangrienta”, se celebrarán las elecciones palestinas.