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COYUNTURA

La economía española crecerá un 3,4 por ciento en el 2005, según La Caixa

Por Raquel IbáñezTiempo de lectura1 min
Economía09-07-2005

Según el informe semestral de Caixa Catalunya, el PIB español mantendrá un fuerte ritmo de crecimiento este año y se acelerará más el que viene, hasta un 3,8 por ciento. Esto será gracias, sobre todo, al dinamismo de la demanda interna, mientras que el sector exterior seguirá quitando puntos al crecimiento.

“La economía va bien, pero el modelo de crecimiento es difícilmente sostenible, ya que se basa fundamentalmente en la demanda interna y carece de fuerza en el sector exterior”. Éstas fueron las palabras de Narcís Serra, presidente de Caixa Catalunya, en la presentación del informe de esta entidad sobre la economía española. Éste prevé que el PIB crezca este año un 3,4 por ciento, y aún más para el 2006: un 3.8 por ciento. Estos cálculos están en la franja más alta que maneja el Gobierno. El crecimiento se debe, fundamentalmente, al progresivo desarrollo de la demanda interna, que crecerá un 5,1 por ciento en el 2005 y un 4,9 por ciento para el 2006. Aunque aumentarán todos sus componentes, destacan la recuperación de la inversión productiva y el gasto de las familias que, lejos de mostrar síntomas de debilidad por el nivel de deuda, se incrementará un 4,6 por ciento. En cuanto a la inversión productiva, ésta llegara a elevarse hasta un 8,3 por ciento en el 2005, mientras que el pasado año se aceleró un tres por ciento. Las razones con las que Caixa explica esta reacción son los bajos tipos de interés, una rentabilidad y unos excedentes empresariales en alza, un agotamiento de la capacidad productiva instalada, y las amenazas derivadas del auge de la inversión en el Este y Asia. El mal dato viene del sector exterior. La Caixa considera que su aportación negativa al crecimiento, que se mantendrá este año por la debilidad de la demanda europea, será de un 2,4 por ciento. Aunque para el año 2006 la entidad cree que este dato mejorará. Esto será gracias a la recuperación del Viejo Continente, lo que traerá consigo una aceleración de las exportaciones: de un 0,5 por ciento en el 2005 a un 5,1 por ciento en el 2006.