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CINE

Incertidumbre ante unos Oscar que podrían premiar a Scorsese

Por Eduardo IglesiasTiempo de lectura2 min
Espectáculos20-02-2005

En la semana previa a los Oscar las apuestas y las quinielas no terminan de decidirse. Podría ser el año de Martin Scorsese, uno de los cineastas americanos más importantes de las tres últimas décadas, quien, sin embargo, no ha recibido aún un Oscar a mejor director o mejor película. Aunque Hollywood ha dejado sin este reconocimiento a algunos de sus mayores talentos, filmes épicos y comerciales como Gangs of New York y El aviador dan a la Academia lo que necesita para que Scorsese salga premiado.

Las once candidaturas de El aviador no tendrán significado si Scorsese no consigue un premio grande. Conociendo la Academia, el único que podría quitarle su Oscar sería Clint Eastwood, que vuelve a ser nominado después de Mystic River. Eastwood podría volver a repetir Oscar después de Sin perdón. Al fin y al cabo, todo puede quedar en homenajear a dos veteranos nunca suficientemente reconocidos. El mejor actor seguramente se decida entre los dos ganadores de los Globos de Oro, Leonardo DiCaprio y Jamie Foxx. DiCaprio es otra estrella sin Oscar y eso suele pesar mucho. Ambos actores compiten encarnando a personajes reales, aunque Foxx cuenta con el aliciente de interpretar a un ciego -ya se sabe que encarnar a alguien con una minusvalía gusta mucho en Hollywood-. En el saco de candidatos están Eastwood, Johnny Depp -a quien algún día le tendrán que dar un Oscar- y Don Cheadle. El terreno de las actrices es más dudoso. Según la psicología de Los Ángeles se quedarían fuera de la lucha Catalina Sandino Moreno -su papel está hablado en español- e Imelda Stauton -por ser un filme demasiado social para Hollywood-. A Kate Winslet también es hora de que le den un Oscar después de cuatro nominaciones, aunque trabajar en un filme semi-independiente como ¡Olvídate de mí! podría perjudicarla. Las otros dos posibles son Annette Bening, que ya ganó el Oscar por American Beauty, y Hilary Swank, otra oscarizada por Boys don´t cry. Fuera de lo que son los grandes premios y los grandes filmes podría estar el espacio de dos filmes poco hollywoodienses. Aunque cuente con Julia Roberts y Jude Law, Closer demuestra su origen teatral y su excelente trabajo de actores. Quizá por eso a nadie le sorprendería que repitiese sus Globos de Oro a mejores actores secundarios para Clive Owen y Natalie Portman. Mucho más indie es Entre copas (Sideways), nominada a mejor película y mejor director. Lo más normal sería que, en el caso de un filme como este, se conforme con el Oscar a mejor guión original. Al fin y al cabo, a Hollywood le gusta premiarse a sí mismo. Y si después del Globo de Oro Mar adentro partía como favorita, los malos resultados en la taquilla estadounidense le están dando muchas preocupaciones a Alejandro Amenábar. Un rival directo, la francesa Los chicos del coro, y La mala educación, de Almodóvar, están recaudando mucho más en un país donde en el cine lo que importa son los beneficios.