ANÁLISIS DE CULTURA
Respetar una cultura, actuar contra los derechos
Por Marta G. Bruno2 min
Cultura28-06-2010
Son dos aspectos de la actualidad que despiertan curiosidad por la manera con la que los tratamos teniendo en cuenta nuestras tradiciones. Nos cubrimos los ojos con un trapo, nos volvemos a veces incoherentes. El primero de ellos tiene que ver con las reacciones que ha suscitado el estreno del brutal pero por desgracia real documental sobre la matanza de ballenas en Japón. The cove, grabada en parte con cámaras ocultas, muestra al mundo una práctica conocida pero poco denunciada: la matanza de delfines en el país asiático. La cinta, aunque parezca mentira, ha despertado todo tipo de críticas entre algunos grupos que sostienen que la caza de estos animales acuáticos es una tradición centenaria. Piden respeto para salvaguardar su arraigada cultura. La película se estrenará en Japón, pero con retraso por estos altercados. Es cierto que muchas familias niponas comen de esta caza furtiva, de la pesca incontrolada de ballenas...que la cinta denuncia. De hecho, su creador, Paul Watson, podría ir a la cárcel por “sabotaje”. Desde fuera de este país podemos considerar esta práctica como cruel, y lo es. Pero cierto es que mañana podrían acudir a España grupos conservacionistas que nos tachen de salvajes por “matar” toros...cuando para nosotros esta práctica forma parte de nuestra cultura. Son dos ejemplos de lo que para cada país implica una maldad...o parte de una tradición. Y no sólo me ciño a la delgada línea entre lo tolerable o no en cuanto a nuestro uso de las libertades animales. La introducción de otras culturas en nuestro país, hasta hace escasos años ajeno a las tradiciones de otras zonas del mundo, ha provocado que España se convierta en territorio interracial, diversificado y tolerante. Pero no siempre. Hace ya varias semanas que los partidos políticos se ven sumidos en un profundo debate sobre la prohibición o no del burka y el niqab en España. Son ya varios los municipios que ya lo han desterrado, como Coín o Barcelona. ¿Dónde está límite entre el respeto hacia una cultura y el respeto hacia la propia mujer, en igualdad con el resto de su género en el mundo? Cada cual pide respeto hacia sus costumbres...pero aquí no está en juego la vertiente económica...sino un aspecto mucho más inquebrantable...el respeto hacia la mujer.
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Marta G. Bruno
Directora de Cultura de LaSemana.es
Licenciada en Periodismo
Estudio Ciencias Políticas
Trabajo en 13TV
Antes en Intereconomía TV, La Razón y Europa Press