ANÁLISIS DE ECONOMÍA

Rebajas antes del 7 de enero

Por Gema Diego2 min

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Ford ha rebajado un 25 por ciento el precio de sus coches para deshacerse de un stock que no deja de crecer. Los precios en los mercados centrales de los alimentos típicos de las comilonas navideñas se están empezando a parecer a los que tenían hace 15 años. Y si se mira el escaparate de cualquier comercio, hay muchas posibilidades tropezar con un cartel de oferta. Las empresas han recortado (racaneado) sus regalos-cestas-aguinaldos de Navidad para sus empleados. Hasta la gasolina ha bajado -mientras la OPEP no lo remedie-. Este afán por salvar la campaña de ventas en Navidad rebajando los precios antes del consabido 7 de enero va a acabar por tumbar la inflación. Pero eso no va a ser la solución a los problemas. Hay miedo a consumir si no se trata de productos imprescindibles. Tienen las de perder los coches, los alimentos de lujo, la ropa y el calzado, la restauración, el sector turístico, la vivienda -hija del sector más damnificado de la crisis en España, la construcción-. Las tiendas están desangeladas al albur de las pocas ganas de gastar dinero que animan a la población. Está claro que el mes que viene no va a haber cuesta de enero, sino cuesta de 2009. Aunque el Gobierno augura que los efectos de su fondo de inversión local se notarán a partir de abril, momento en que la economía comenzará a recuperarse, lo cierto es que hay demasiada incertidumbre sobre cómo y cuándo se superará una crisis para la que nadie tiene la receta; pues ya se sabe que hay recetas viejas que al principio funcionan, pero luego tienen muchos efectos secundarios. Como la recetita piramidal de Madoff, un Gescartera o un Fórum y Afinsa para ricos. No es el primero, ni tampoco será el último si los organismos reguladores no se ponen de una vez por todas las pilas para evitar estos fraudes.

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