PROTOCOLO DE KIOTO
Rusia hace posible la reducción global de contaminantes
Por Berta Barona2 min
Sociedad30-09-2004
Rusia desbloquea la puesta en marcha del Protocolo de Kioto. Ya es viable este documento, firmado en la ciudad japonesa de Kioto en 1997 y que tiene como objetivo reducir las emisiones de dióxido de carbono, el más importante gas de efecto invernadero, en un 5,2 por ciento con respecto a las cotas de 1990 y otros seis contaminantes.
La incorporación de Rusia al Protocolo de Kioto va a hacer posible la aplicación del acuerdo en los próximos meses. Era necesario que entre todos los países integrantes sumaran como mínimo el 55 por ciento de los gases que se emiten a la atmósfera en todo el mundo para que pudiera entrar en vigor. Con Rusia, que produce el 17,4 por ciento de la contaminación mundial, se ha superado ese porcentaje. Todavía hay que esperar que la Duma, la Cámara Baja del Parlamento Ruso, confirme la adhesión del país al protocolo. Pero el Partido del Kremlin es mayoría en el Parlamento, por lo que Rusia se integrará sin duda con los demás países que ya han suscrito. La reunión del gabinete en la que se tomó la decisión estuvo polarizada entre los ministros partidarios y los contrarios a la integración en el acuerdo. El sí final responde a una serie de factores políticos y económicos. El viceprimer ministro ruso, Alexandr Zhúkov, ha declarado que "el Protocolo de Kioto supone la formación de un nuevo sector en el mercado global, interesante y prometedor", en referencia a la venta de derechos de emisión de gases contaminantes. El acuerdo también implica un mayor acercamiento entre Rusia y la Unión Europea y un paso adelante para su ingreso en la Organización Mundial del Comercio (OMC). Aún queda una asignatura pendiente en lo que a reducción de gases se refiere, y es convencer al país más contaminante del mundo de que se adhiera al acuerdo. Este país es Estados Unidos, que hace tres años decidió retirarse del protocolo, bloqueándolo hasta la incorporación de Rusia. En diciembre se va a celebrar una Conferencia de las Partes de la Convención de las Naciones Unidas para el Cambio Climático en Buenos Aires. Uno de los asuntos que se tratarán en ella será la negociación con la Casa Blanca.