MALOS TRATOS

Al menos 32 mujeres han muerto por violencia doméstica en 2004

Por Alfredo López Zamora2 min

Sociedad29-06-2004

Todos podemos convertirnos en víctimas de la violencia doméstica. Las agresiones que se producen en el hogar han traspasado las barreras del sexo y han llegado a afectar tanto a hombres, niños y ancianos. Las escandalosas cifras de mujeres que padecen maltratos, tanto físicos como psíquicos, han conseguido que la sociedad se conciencie ante esta crítica situación.

En sólo seis meses ya son 32 las mujeres que han fallecido en manos de sus cónyuges. Mayo se ha convertido en el mes más oscuro de 2004 al recoger ocho asesinatos. Junio contabilizó seis muertes convirtiéndose en el segundo mes más trágico, al igual que marzo en el que el mismo número de mujeres perecieron. Enero fue en el que menos víctimas registraron. En el mismo período de 2003 el número de muertes causadas por la violencia doméstica ascendió a 35. A finales de año la cuantía se elevó, según datos del Consejo General del Poder Judicial, a 65 mujeres y 7 hombres que perdieron la vida en manos de sus parejas. Las mujeres son las más afectadas, pero la tendencia de agresión a los hombres se encuentra en continuo ascenso con el paso de los años. En lo que llevamos de año Andalucía se sitúa, con once fallecidos, como la comunidad autónoma con mayor número de agresiones y muertes. Está seguida por la Comunidad Valenciana, con cinco víctimas; Cataluña con cuatro; Madrid con tres; Baleares con dos, y Extremadura, Navarra, País Vasco, Aragón, Islas Canarias, Castilla y León y Castilla-La Mancha, con una, respectivamente. De las 32 muertes registradas este año por violencia doméstica, en seis de ellas el agresor puso después fin a su vida. También se han contabilizado ocho personas con vínculos familiares que han fallecido a consecuencia de las agresiones en el hogar, seis de ellas menores de edad. Ante esta situación incontrolable se han presentado distintas medidas para evitar las agresiones. La última iniciativa proviene de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, quien presentó el primer prototipo electrónico de detección automática de proximidad de un maltratador. Consiste en dos aparatos de tamaño reducido, uno para la víctima y otro para el agresor, que emite una señal acústica o luminosa si el agresor se acerca a menos de 500 metros, y que a la vez envía un mensaje de alarma al teléfono de Emergencias 112.