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Secuestradores iraquíes amenazan con ejecutar a un rehén cada 48 horas

Por Isabel A. VegaTiempo de lectura2 min
Internacional18-04-2004

Los familiares de los cuatro italianos secuestrados el pasado lunes en Bagdad por las “Brigadas Verdes de Mahoma”, permanecen angustiados tras la ejecución el miércoles de la semana pasada de uno de ellos y la amenaza de los secuestradores de un nuevo asesinato cada 48 horas.

Fabricio Quattrocchi, estaba entre los cuatro guardias de seguridad italianos que fueron secuestrados el lunes en Bagdad. La noticia de su ejecución se hacía pública la pasada semana junto a la amenaza por parte de los secuestradores, de continuar con las ejecuciones y asesinar a un nuevo rehén cada 48 horas. El ministro de Asuntos Exteriores italiano, Franco Frattini, afirmó tras conocerse la muerte de uno de los retenidos, que el Gobierno italiano no llevaría a cabo “ninguna negociación para conceder a los terroristas lo que quieren, porque de lo que se trata es de abrir un diálogo”. Asimismo añadió: “intentaremos explicar a los secuestradores que estas personas no han ido a Iraq a combatir, sino a buscar un trabajo honesto, y no pueden ser considerador prisioneros de guerra”. Finalmente, afirmó que Siria podría jugar un papel relevante en la liberación de los rehenes porque “puede aconsejar cómo llegar a los raptores o ejercer influencia sobre ellos”. Los secuestradores, supuestamente suníes, pretenden la inmediata retirada del contingente italiano en Iraq para lo que dieron un ultimátum, el cual, una vez concluido, significaría la muerte de otro prisionero. Mientras Frattini intentaba autentificar el contenido de esta amenaza, su homólogo nipón se congratuló por la liberación de tres ciudadanos japoneses que permanecían en cautiverio desde la semana pasada. La puesta en libertad tuvo lugar el jueves de la semana pasada. Los protagonistas, una fotógrafo independiente y sus dos cooperantes, emprendieron poco después de su liberación el regreso a Tokio, desde donde anunciaron su intención de seguir trabajando en Iraq. Por otra parte, un ciudadano chino, cuyo secuestro no había sido anunciado, fue liberado y entregado a la embajada de China en Bagdad el viernes de la semana pasada, según anunció un portavoz suní del Comité de los Ulemas. Además, otros siete ciudadanos chinos fueron puestos en libertad y llevados sanos y salvos a la capital. Diplomáticos del país asiático indicaron que probablemente los secuestrados fueron confundidos por japoneses o surcoreanos, cuyos gobiernos, al contrario que China, si han desplegado fuerzas militares en Iraq. Finalmente, tres periodistas checos secuestrados el domingo de la semana pasada también fueron liberados, así como otros dos ciudadanos japoneses, y un palestino de nacionalidad canadiense. A pesar de ello, se anunció el secuestro de un hombre de negocios jordano, un soldado estadounidense y el ministerio de Exteriores danés sospecha que un empresario de este país también podría haber caído prisionero en manos de estos iraquíes radicales.