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ATENTADOS EN MADRID

Una mochila no explosionada, una carta y un video apuntan a Al Qaeda

Por Noelia Hernández MartínTiempo de lectura3 min
España13-03-2004

Una llamada en nombre de ETA al periódico Gara y a la televisión ETB, el hallazgo de una cinta en árabe con versículos del Corán, una mochila con explosivos, una carta y un vídeo de Al Qaeda reivindicando el atentado y la detención de cuatro ciudadanos árabes. Estas son algunas de las pistas que dirigen hacia los autores de una masacre que ha dejado ya 200 muertos.

"Cuando vi la explosión, supe que se trataba de una atentado de ETA", explicaba un vecino de la estación de El Pozo a los periodistas. Todos. Los ciudadanos, las autoridades políticas señalaron a la banda terrorista ETA. Los intentos de la banda de provocar una masacre en Nochevieja de 2002 y en Nochebuena de 2003 en Chamartín y en el Valle de Arán y la incautación de 500 kilos de explosivos hace una semana hacía pensar que ETA quería provocar el caos en la capital española. Esto hizo creer que tras los atentados se escondía la autoría de la banda asesina. Sin embargo, la sombra de Al Qaeda aparecía en forma de carta remitida a un diario árabe editado en Londres. En el documento, las Brigadas de Abu Hafs Al Masri reivindicaban la autoría del atentado. Ese mismo día, el ministro del Interior, Ángel Acebes, anunciaba el hallazgo en Alcalá de Henares de una furgoneta que había sido robada en Madrid el 28 de febrero y en la que se encontraron ocho detonadores y una cinta con versículos del Corán. La hipótesis de Al Qaeda tomaba fuerza. Hipótesis que siguió aumentando el viernes cuando el periódico Gara y la televisión ETB recibieron una llamada en nombre de ETA en la que aseguraban que esta organización "no tiene ninguna responsabilidad" en la masacre. La cadena vasca aseguró que la voz fue "cotejada" y coincide con la de uno de los dos miembros de ETA que, a través de un vídeo, anunció la tregua en Cataluña. Las Fuerzas de Seguridad del Estado también se han incautado de una mochila en Vallecas que contenía un explosivo de Goma 2 de la marca ECO fabricado en España, junto con un detonador y un teléfono móvil. El detonador es igual al hallado en la furgoneta de Alcalá de Henares y están fabricados en cobre y no en aluminio, que son los que suele usar ETA. Sin embargo, la configuración de las instrucciones del teléfono estaban en español. Las investigaciones se dirigen, por tanto, hacia estas dos bandas terroristas. El pasado sábado, el Ministerio del Interior anunció la detención de al menos cuatro ciudadanos árabes relacionados con la tarjeta de teléfono que se encontró en la mochila de Vallecas. Las críticas hacia el Gobierno por una supuesta ocultación inicial de información provocaron sucesivas comparecencias del ministro Acebes con nuevos datos. Las novedades en la última comparecencia, el sábado 13 poco antes de las 12 de la noche, reforzaban la tesis de que detrás estaba Al Qaeda: se había encontrado en la M-30, entre el Tanatorio y la mezquita de Madrid, una cinta de vídeo en la que un hombre, hablando en árabe y con acento marroquí que se postulaba portavoz del representante de Al Qaeda en Europa, reivindicaba los atentados como respuesta al apoyo de España al ataque de Iraq hacía justo dos años y medio y amenazaba con que no serán los últimos ataques. Los servicios de inteligencia británicos, franceses y marroquís colaboran intensamente con las fuerzas de seguridad españolas en la investigación que esclarecerá la autoría del mayor atentado en la historia de España y de Europa.