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HAITÍ

Grupos de rebeldes armados se sublevan contra el presidente Aristide

Por Alejandro RequeijoTiempo de lectura2 min
Internacional15-02-2004

Haití se encuentra al borde de una guerra civil. Los enfrentamientos entre rebeldes armados y fuerzas de seguridad registrados durante la semana pasada dejaron a varias ciudades del norte del país al borde de la anarquía. Ante el miedo por un posible avance de los rebeldes, los partidarios del Gobierno levantaron barricadas en las dos ciudades más importantes, Puerto Príncipe y Cap-Haitien.

Los grupos rebeldes exigían la dimisión inmediata del presidente del país, Jean Bertrand Aristide, cuyo mandato expira en el 2006. Le culpan de la crisis económica y política que atraviesa el país. A pesar de ello Aristide renunció a presentar su dimisión, aunque prometió la convocatoria de unas elecciones legislativas. El presidente haitiano ya realizó la misma promesa el año pasado pero todavía no la ha cumplido. La oposición convocó para esta semana una manifestación en la capital donde se volverá a pedir la dimisión del presidente. Ante estos acontecimientos, el primer ministro haitiano, Yvon Neptune, reconoció que el Gobierno había perdido el control de la situación. “La Policía Nacional es incapaz de reestablecer el orden en solitario”, señaló Neptuno, quien posteriormente rectificó sus palabras y aseguró que todo estaba bajo control. Asimismo, acusó a la oposición de estar detrás de estos enfrentamientos que ya se han cobrado la vida de alrededor de unas 50 personas. La comunidad internacional ya ha reaccionado ante la ola de violencia que vive el país caribeño. La ONU advirtió la semana pasada de la inminencia de un desastre humanitario y realizó varios llamamientos a detener la revuelta. Por su parte, el secretario de estado de EE.UU,. Colin Powell, acompañado en Washington por los líderes de la comunidad del Caribe (CARICOM), advirtió que no aceptarán un nuevo Gobierno que surja de un golpe de estado. Quien ya no sufrirá más esta crisis es la familia del presidente Aristide. Su madre, su mujer y sus dos hijas abandonaron Haití rumbo a Estados Unidos. Aunque las razones aún están por confirmar, fuentes no oficiales afirman que los familiares del presidente haitiano acudieron a un funeral. Haití, el país más pobre de América, arrastra una crisis política desde las fraudulentas elecciones legislativas de 1999 que se ha intensificado en los últimos meses con una ola de manifestaciones organizadas por la oposición, que reclama la renuncia del presidente Aristide.