Las organizaciones internacionales reducen su personal en Bagdad

Por Ángela González Rodríguez2 min

Internacional30-10-2003

Varios organismos internacionales decidieron reducir su personal en la región a consecuencia de los atentados que la semana pasada tuvieron lugar contra la sede del Comité Central de la Cruz Roja (CICR) y diversas comisarías de Policía de la capital iraquí.

El secretario de Defensa estadounidense, Donald Rumsfeld, expresó su malestar por la decisión tomada por Naciones Unidas y diversas agencias de ayuda humanitaria de evacuar o reducir su personal en Bagdag. "No hay duda de que fue atacado un edificio de la ONU. No hay duda de que los terroristas tratan de obligarlos a irse y me parece que, al menos en lo que respecta a ciertas organizaciones, lo están logrando", señaló el responsable norteamericano. Tras los atentados, la reacción de los diferentes organismos que prestan auxilio en Bagdad no se hizo esperar. El secretario general de la ONU, Kofi Annan, decidió retirar temporalmente a todo el personal internacional que permanecía en Bagdad –15 funcionarios- tras el ataque del que fue víctima la sede de la Cruz Roja en esta ciudad. Un portavoz del secretariado de la ONU, Stephan Dujarric, matizó que se pidió salir del país a una docena de personas hasta que se concrete "qué se debe hacer en materia de seguridad para continuar el trabajo". La decisión sólo afecta a los trabajadores extranjeros en la capital iraquí y no a los que se hallan en la norteña ciudad de Arbilo. La ONU no es la única presencia internacional reducida en Bagdad, ya que el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) también decidió abandonar la ciudad tras la ola de violencia. La portavoz de la Cruz Roja, Nada Doumani, precisó: "todos los expatriados van a abandonar Iraq para reunirse durante unos pocos días en un país vecino con los directores de Ginebra". "Vamos a examinar quién debe permanecer y vamos a decidir qué actividades seguiremos desempeñando", añadió. Por su parte, la ministra de Asuntos Exteriores de España, Ana Palacio, señaló que la situación en el país árabe "es complicada", pero que la seguridad de la embajada "se reevalúa permanentemente". La jefa de la diplomacia española explicó que el Gobierno toma medidas "continuamente". Desde el pasado mes de mayo, un sistema informático valora las condiciones de seguridad de la delegación.