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INMIGRACIÓN

PP y PSOE endurecen la Ley de Extranjería

Por Noelia Hernández MartínTiempo de lectura2 min
España11-09-2003

Contra muchos pronósticos, socialistas y populares alcanzaron el pasado jueves un acuerdo sobre la cuarta reforma de la Ley de Extranjería, que permitirá mejorar la situación de los inmigrantes y frenar la marea de sin papeles que asola España.

Con un verano cargado de pateras, sin papeles que pretenden alcanzar las costas españolas y una concienciación social que ubica a la inmigración como el cuarto problema que más preocupa a los españoles, según la última encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), los políticos han decidido abandonar los pitos y abucheos mutuos para sentarse a negociar sobre un problema que cada vez necesita más consenso y fuerza para no desbordarse. De esta forma, el Gobierno y el principal partido de la oposición lograron el pasado jueves un acuerdo sobre la reforma de la Ley de Extranjería que entrará en vigor en próximo mes de enero. Este acuerdo se produce tras los múltiples desencuentros que ambos partidos han protagonizado a lo largo de los años. Así, en 1999, el PP no apoyó un texto que fue consensuado por todos los grupos de la oposición y el PSOE tampoco dio su brazo a torcer en la reforma elaborada por el Gobierno en 2000. Entre las medidas aprobadas destacan la apertura de vías para la entrada de inmigrantes, como un visado de estancia para búsqueda de empleo para hijos y nietos de españoles, con el que permanecerán de forma regular durante tres meses. Otra fórmula para incentivar el ámbito laboral es un visado para ciertos sectores o actividades, de otros tres meses, para que los inmigrantes se inscriban en los servicios públicos de búsqueda de empleo. Asimismo, se tomarán medidas para evitar los mercados grises y opacos de personas sin censar ni identificar que se convierten en carne de cañón para los desaprensivos que aparecen en medio de esos mercados sucios. Para ello, se penalizará la contratación de inmigrantes irregulares por competencia desleal con las empresas que los contratan con un salario adecuado y una alta en la Seguridad Social. El Gobierno también financiará programas de retorno, la Policía podrá tener acceso a ciertos datos sobre los extranjeros que vivan en España, al igual que los tiene de los españoles, y se obligará a las compañías aéreas a controlar las listas de sus pasajeros, pero respetando las garantías reclamadas por los socialistas sobre el trato que deben recibir los que sean devueltos a su país. A pesar del acuerdo alcanzado entre el Ejecutivo y el PSOE, ambas formaciones aguaron las expectativas creadas con su acuerdo y matizaron el pasado viernes que el alcance del pacto es limitado al persistir las discrepancias sobre las cuestiones más importantes.