LENGUA

Arturo Pérez-Reverte ingresa en la RAE con todos los honores

Por Isidro García-Recio López2 min

Cultura26-01-2003

Arturo Pérez-Reverte ya es miembro de la Real Academia Española. Tras la publicación de su último libro, La Reina del Sur, todo parece indicar que el escritor cartaginés atraviesa el mejor momento de su carrera.

La práctica totalidad de los académicos que componen la institución de la lengua por antonomasia, votaron por él. El resultado del escrutinio fue de 26 votos a favor y cuatro en blanco. En definitiva, una inesperada mayoría absoluta en su primera votación. A la cita acudieron 24 académicos -entre otros, Luis María Ansón, Fernando Fernán-Gómez, Juan Luis Cebrián, Antonio Muñoz Molina...- y todos dieron el sí al único candidato para ocupar el sillón T. Víctor García de la Concha, Director de la RAE, comentó así la noticia, "se logra un equilibrio entre los tres sectores de la Academia: el de los creadores, el de los lingüistas y filólogos y el de las ciencias sociales". Por su parte, Pérez Reverte recibió la noticia con emoción y dijo que el discurso de su investidura tratará del lenguaje de los delincuentes del Siglo de Oro. Confesó que lo único que él puede aportar a la Academia son sus lectores (record histórico de ventas con El capitán Alatriste) y sus novelas (gran parte de ellas llevadas al cine), "No soy un renovador del lenguaje, ni de la novela, ni de nada. Sólo soy un tipo que cuenta historias lo mejor que puede. Así que lo único que puedo aportar son mis novelas y mis lectores de aquí, de América y de otros países. Ellos entran conmigo en la Academia". Pero no todos los amantes de la lengua castellana aceptaron con buen grado la incursión de Pérez Reverte en la RAE, ya que a las puertas de la docta casa se dieron cita numerosos curiosos que rechazaban al nuevo académico. Los contrarios a la entrada del escritor cartaginés portaron pancartas, entre las que se podían leer, "¡Pérez-Reverte, Tamara es la siguiente!", además propusieron a Chiquito de la Calzada o Jesulín de Ubrique, como candidatos para un asiento en la Academia y exigieron respeto para Manuel Alvar, a quien creían humillado por la poca valía literaria de su sucesor. A sus 51 años de edad, Pérez Reverte inscribe su nombre con letras de oro en los densos volúmenes de la historia de España. El escritor, periodista y guionista cinematográfico ha encontrado en las novelas de aventuras un filón que no cesa de darle alegrías de todo tipo. Los 21 años que ejerció como reportero de prensa, radio y TV dejaron en él un poso, ahora canalizado en las páginas de esas obras que encandilan a tantas y tantas gentes.