CORRUPCION
El ¬caso Ercros¬ amenaza con salpicar a Josep Piqué
Por Elena López Oliva
2 min
España10-06-2001
Josep Piqué era en 1991 representante de Ercros, empresa matriz de la petrolera Ertoil, cuando ésta fue vendida, supuestamente de forma fraudulenta, a la francesa Elf a través de la sociedad luxemburguesa General Mediterranean Holding (GMH).
La juez de la Audiencia Nacional Teresa Palacios investiga desde hace un año el destino de unos 20.000 millones de pesetas de los 41.400 que Ercros obtuvo por la venta de su filial Ertoil. Según la resolución dictada por la juez, la operación de venta fue protocolizada en 1991 ante notario por el actual ministro de Asuntos Exteriores, Josep Piqué. La Sala Segunda del Tribunal Supremo ha decidido retener el caso Ercros sin pronunciarse sobre la posible implicación del ministro de Exteriores. La decisión fue adoptada el pasado viernes horas después de que la juez Teresa Palacios presentara al Supremo un informe en el que explicaba que, en el caso Ertoil, está estudiando el destino del dinero obtenido por la venta de esa filial, sin que las pesquisas hayan concluido, por lo que no ha podido precisar nada respecto a la existencia de delito o a los presuntos autores. Los magistrados consideran que averiguar el paradero del dinero obtenido por la venta de Ertoil es importante a la hora de determinar si la suspensión de pagos de Ercros fue producto de una descapitalización de la empresa realizada en perjuicio de los pequeños accionistas, trabajadores y acreedores de la sociedad. El presunto alzamiento de bienes alude a la inclusión de una deuda de Ertoil en la suspensión de pagos de Ercros, presentada en 1992. La deuda se había contraído con un grupo de particulares que había invertido 1.770 millones en un proyecto de la sección de petróleo de Ercros. El delito estribaría en haber atribuido la deuda al grupo empresarial en dificultades que iba presentar suspensión de pagos en lugar de dejársela a la empresa solvente a la que correspondía. Mientras el Gobierno declara su plena confianza en Piqué; el ministro de Exteriores ha manifestado sentirse "muy orgulloso de lo que hicimos para intentar salvar una empresa con miles de trabajadores que estaba en una situación muy precaria". Además, ratificó su deseo de que las cosas se aclaren y afirmó no tener ningún inconveniente en ir a declarar si así lo consideran los responsables de la justicia.