FINANCIACIÓN ILEGAL
El ¬caso Filesa¬ toca su fin
Por María Fernández Riveras
1 min
España10-06-2001
El PSOE deberá asumir los pagos de Filesa si Carlos Navarro, Luis Oliveró y Alberto Flores no abonan en diez días la multa de 259 millones que les había sido impuesta en 1997 por la cuota fiscal defraudada a Hacienda. El dinero, en cualquier caso, irá a parar a las arcas del Estado, por tratarse de un delito contra la Hacienda Pública.
El Partido Socialista confía en que el Alto Tribunal investigue el patrimonio real de los condenados y no tenga que pagar la cuota ya que, por ejemplo, el condenado Luis Oliveró aún tiene cuentas en Suiza con cientos de millones de pesetas. Sin embargo, otro de los condenados, Carlos Navarro, ha declarado que no puede afrontar este pago. El Supremo ha tenido que esperar para ejecutar esta condena a que el Constitucional rechazase los recursos de los tres condenados. Asimismo, el Tribunal Constitucional ha anulado la pena del ex senador Josep María Sala que había sido condenado sin pruebas por un delito de falsedad documental. El Partido Socialista Catalán (PSC), el partido de los tres condenados por el caso Filesa, ha acatado las resoluciones del Tribunal Constitucional , aunque también ha querido destacar "la diferencia de trato" respecto a otros casos. Con esta sentencia se pone fin a un largo proceso judicial de financiación irregular que estalló en 1991, que ha dañado profundamente la imagen de los socialistas y que influyó en la primera victoria electoral del Partido Popular (PP) en los comicios de 1996. Este punto y final se suma al del caso GAL, con la excarcelación de los ex responsables de Interior y Seguridad Nacional socialistas José Barrionuevo y Rafael Vera, respectivamente. En este sentido, el vicepresidente del Gobierno y ministro del Interior, Mariano Rajoy, aseguró que la página de los GAL está superada. Asimismo, Rajoy justificó la excarcelación afirmando que "es una decisión justa y legal, puesto que se trata de un caso que tuvo lugar hace 18 años y hay que mirar al futuro". Mirar al futuro parece que es lo que se pretende con el cierre de estos dos casos, dos de más farragosos de la historia reciente española.