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MÚSICA

Madonna sorprende en Barcelona en el primer concierto de su gira por Europa

Por Luis Suárez RuedaTiempo de lectura1 min
Espectáculos09-06-2001

La cantante estadounidense Madonna ofreció el pasado sábado 9 de junio el primer concierto de su gira Drowned World Tour con la que recorrerá Europa presentando su último y exitoso disco Music. El concierto se dividió en cuatro partes diferenciadas en las que la cantante sorprendió al público tanto por sus movimientos sobre el escenario como por el vestuario que utilizó.

Tras ocho años sin pisar un escenario, Madonna aterrizó en Barcelona ante la gran expectación de los más de 18.000 asistentes a su primera cita en el Palau Sant Jordi. Salió a escena con una falda escocesa sobre unos pantalones de cuero y una camiseta y abrió el concierto con la canción que da nombre a su gira: Drowned World. Después llegaron varias de las más recientes producciones de la cantante estadounidense, también canciones algo más antiguas como Beautiful stranger y Ray of light seguidas de un primer cambio de vestuario. A su regreso, casi oculta por un gran kimono negro de inspiración japonesa, interpretó Frozen, una de sus canciones más emblemáticas. En la tercera parte del concierto el público pudo ver a la artista con un look vaquero, idóneo para interpretar, como hizo, Don´t tell me y Human nature. La última parte del acto lo abrió una versión instrumental de Don´t cry for me Argentina, al que siguió la versión en español de What it feels like for a girl (Lo que siente una mujer). Una de las canciones más esperadas, Music, cerró una actuación en la que no hubo bises, aunque el público esperó durante un tiempo más que suficiente. Durante la actuación, Madonna estuvo arropada por cinco músicos, diez bailarines que se entregaron con totalidad, seis pantallas gigantes de vídeo e, incluso, un toro mecánico para añadir espectacularidad al acto que superó, por escasos minutos, la hora y media de duración.