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ESTADOS UNIDOS

El Pentágono quiere pagar a periodistas para conseguir una opinión favorable en Europa

Por Cristina FuertesTiempo de lectura2 min
Comunicación22-12-2002

La posible guerra contra Irak no gusta ni a los norteamericanos, ni al resto del mundo. Por ello, el Departamento de Defensa de EE.UU. ha propuesto pagar a determinados periodistas para que la sociedad posea una opinión favorable sobre las actuaciones que el gobierno de Bush está llevando a cabo contra Irak.

El 11 de septiembre no sólo demostró la barbarie y la crueldad, sino también la invulnerabilidad de EE.UU frente al terrorismo y, por tanto, a los países árabes con los que había estado enfrentado durante años. El enfrentamiento todavía continúa y, en este caso, Irak ha sido el elegido. De esta manera, se ponía en marcha hace unos meses una campaña contra el régimen de Sadam Husein para conseguir apoyos del resto de los países europeos, ya que en toda guerra es la unión la que hace la fuerza. Sin embargo, los múltiples esfuerzos de la Administración americana no han servido de nada, ya que ni los americanos ni el resto de potencias europeas apoyan el posible conflicto contra Irak. Por ello, el Pentágono ha propuesto determinados planes para intentar lavar su deteriorada imagen más allá de sus fronteras. Así, proponen llevar a cabo una amplia ofensiva mediática sobre los países aliados como Pakistán o Alemania y no contra enemigos o aliados en el denominado Eje del Mal. La manera de conseguir una opinión pública favorable al gobierno de Bush en el conflicto EE.UU e Irak es negociar con aquellas personas que influyen en los pensamientos de la sociedad de un país: los periodistas. Estos tienen como función básica informar sobre las acciones de un determinado gobierno a la correspondiente sociedad. De este modo, el periodista se convierte en instrumento para poder difundir el cómo, el porqué, el para qué, a quién y el dónde de cualquier acontecimiento. Es por ello por lo que el Pentágono ha empezado a pagar a determinados informadores para que den una imagen positiva del ejército estadounidense; además, determinados medios de comunicación se han atrevido a decir que ya son muchos los que han aceptado esta propuesta. Asimismo, dentro de esta iniciativa se intenta minar la influencia del islamismo integrista mediante la creación de mezquitas moderadas. Todo con el fin de conseguir que la sociedad se posicione a favor de EE.UU. y en contra del islamismo. No obstante, la iniciativa del Pentágono ha causado una fuerte oposición dentro del mismo, ya que, si se lleva a cabo y se descubre el pastel (como se ha descubierto), provocará la reacción de aquellos países en los que se intenta que posean una imagen favorable a la Administración Bush, así como a las acciones que adopta el mismo. La guerra de Vietnam provocó una reacción social contra las operaciones militares que se estaban desarrollando. Parece que 40 años más tarde la sociedad americana, así como la del resto del mundo protestan contra el posible ataque de EE.UU. a Irak. Y es que en muchos casos la potencia con más poder necesita el apoyo del resto de los países.