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DERECHO A LA VIDA

El Congreso descarta las nuevas propuestas de ley para despenalizar la eutanasia en España

Por Gema Cubo CabreraTiempo de lectura1 min
Sociedad20-12-2002

Para Marisa Castro, portavoz de Izquierda Unida durante el debate celebrado el pasado martes en el Congreso, en el tema de la eutanasia como en otros muchos España debe mirar hacia Europa y subirse al carro de la corriente iniciada por países como Holanda y Bélgica, donde morir se considera un derecho cívico. Sin embargo, antes que europeos somos personas y solucionar la muerte anticipándose a ella no es la mejor manera de afrontarla, según Andrés Ollero, diputado del Partido Popular.

Morir es tal vez una de las decisiones más íntimas del individuo. El problema viene al intentar sopesar la necesidad real de llevar a cabo la eutanasia o muerte directa del paciente que desea acabar con su propia vida. Las iniciativas propuestas en el Congreso de los Diputados por Izquierda Unida, Iniciativa per Catalunya-Los Verdes y Esquerra Republicana, estuvieron dirigidas a la modificación del Código Penal con el fin de despenalizar esta práctica, así como de la Ley General del Medicamento, para que el paciente pueda elegir libremente la medicación que quiere recibir. Según las proposiciones del ley, no será considerado delito la cooperación en la consecución de una muerte digna y sin dolor de otra persona, cuando esta sufra una grave enfermedad que le conduzca a la muerte o le ocasione padecimientos permanentes difíciles de soportar, y siempre a petición explícita del enfermo. Este debate viene precedido por un reciente caso dado en Francia, donde el joven tetraplégico de 21 años Vincent Humbert ha dirigido una carta al presidente de la República, Jacques Chirac, para pedirle el derecho a morir. Vincent sufrió un accidente de tráfico el 24 de septiembre de 2000 que le dejó en un coma profundo durante nueve meses. Dos años después, el joven confiesa estar afectado en todos sus sentidos vitales hasta el punto de querer morir. El Partido Socialista Español fue el único partido que votó en favor de las iniciativas en favor de la eutanasia. El resto, con el PP a la cabeza, se manifestaron en contra, mostrándose partidarios de fomentar el desarrollo de cuidados paliativos y aplicar la reciente norma de últimas voluntades, que supone el abandono voluntario del tratamiento por parte del paciente. Por el momento, el debate social sigue abierto a la espera de un mayor consenso.