EEB

Registrados 1.600 nuevos casos de vacas locas en la UE

Por Fernando Cancio Martínez2 min

Sociedad28-11-2002

La encefalopatía espongiforme bovina (EEB), más conocida como la famosa enfermedad de las vacas locas, vuelve a ser tema de conversación. En los primeros nueve meses del año los 15 países de la Unión registraron datos que para muchos podrían ser señal de alerta. El comisario europeo de Salud y Protección del Consumidor, David Byrne, presentó al Consejo de Ministros de Agricultura y Pesca de la Unión Europea (UE) los datos que muestran 1.666 nuevos casos de enfermedad de vacas locas.

Estas cifras señalan que de cada 5.000 animales estudiados, uno presentaba la enfermedad. En total, se hicieron más de 7,5 millones de tests. Los animales sanos presentan una incidencia de uno cada 30.000 y los denominados "de riesgo", de uno por cada 1.000. En España se examinaron especialmente los animales que tenían más posibilidades de padecer la enfermedad, en total 44, y dieron positivo 13 de ellos. De los más de 300.000 animales sanos que se sometieron a las pruebas, resultaron infectados 28 y aún se espera el resultado de otros 17. Éste año se han efectuado en España un 28 por ciento más de pruebas para detectar esta enfermedad. En el mismo período de 2001 se los test fueron 107.353, y en el presente año han sido 137.651. Byrne señaló que los datos eran "alentadores" y quiso señalar que, según uno de los informes de la Oficina de Alimentación y Veterinaria, todos los miembros de la Unión han hecho "esfuerzos considerables" para promover todas las nuevas medidas, especialmente aquellas que se refieren a los controles del pienso. Además de la EEB, existe también la EET, "encefalopatía espongiforme transmisible". Ésta suele darse en ovejas y cabras y, después de las más de 150.000 pruebas llevadas a cabo entre enero y septiembre en toda Europa, 663 dieron positivo y aún se espera el resultado de otras 235. En España 30 fueron los animales infectados y 16 están pendientes de desvelarse. Hay que recordar que, después de los numerosos casos de vacas locas que aparecieron en los últimos años, la normativa comunitaria exige retirar la espina dorsal en ovejas y cabras con más de un año, aunque hay quien quiere rebajar éste tiempo a seis meses, dato que países como Irlanda consideran negativo.