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LA AMENAZA DEL FUEL

Galicia en vilo ante la proximidad de la gran mancha

Por Miguel G. SeséTiempo de lectura1 min
Sociedad01-12-2002

La marea negra provocada por el Prestige parece no tener fin. Más bien todo lo contrario. Cada día que pasa la magnitud del desastre es mayor, así como la desesperación del pueblo gallego, que ve impotente como una gran mancha de fuel está rozando sus costas, y todo apunta a que irremisiblemente chocará contra ellas.

Esta gran amenaza, una mancha de cuatrocientos por doscientos metros, a 1 de diciembre se encontraba a tan sólo nueve millas de la costa de Corrubedo, y se preveía que, como fecha tope, el 3 de diciembre impacte contra las costas gallegas. Las medidas tomadas al respecto tienen tintes bélicos, ya que el pueblo gallego se ha echado a las calles y a las playas, preparándose para combatir por todos los medios este desastre ecológico, que ya se ha cobrado la vida de muchas aves, incluso llegando a estinguir por completo una especie de ornitorrinco. Por el momento, seis buques anticontaminación extranjeros están trabajando en la zona, y ya han conseguido recoger mas de tres mil toneladas de fuel en el mar y dos mil cuatrocientas de residuos en las playas. En Finisterre el pueblo entero está en la calle, bien en manifestaciones que recorren en puerto de arriba abajo, o bien colaborando en las labores de limpieza, aunque todos tienen la opinión común de que las instituciones deberían haber reaccionado con más diligencia. Por otra parte, las investigaciones científicas aseguran que la toxicidad del fuel aumenta cuanto mayor sea el calor, aunque de momento se duda que pueda tener connotaciones nocivas para la salud humana. Pese a tanta traba, son muchos los viajes organizados desde todos los puntos de España con jóvenes voluntarios que marchan hacia Galicia con la intención de echar una mano a gente que sin duda lo necesita.