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CINE

El filme sueco ¬Lilya 4 ever¬, mejor película en Gijón

Por Carlos LacalleTiempo de lectura1 min
Espectáculos29-11-2002

Como se suele decir, los últimos serán los primeros y este ha sido el caso de la cinta sueca Lilya 4 ever, última en exhibirse en la sección oficial del Festival, pero que se ha situado como la gran triunfadora del certamen con tres galardones de gran peso. Este largometraje narra la historia de una joven de Europa del Este que viaja a Suecia engañada por un hombre que la promete amor y una nueva vida, pero que acabará siendo carne de prostíbulo como tantas otras jóvenes rusas captadas para ejercer la profesión más vieja del mundo.

Debido a su crudeza en imágenes en las que, a pesar de todo, aflora la calidad y las desgarradas interpretaciones, esta película se lleva a casa el Premio Principado de Asturias al mejor largometraje, además de un galardón para la jóven Oksana Akinshina como mejor actriz y el favor -y premio- de ser elegida mejor película en la sección Premio Jurado Joven. El americano Paul Thomas Anderson, un veterano en esto de recoger premios por sus películas -suyas son entre otras Magnolia o Boogie Nights- volvió a ver como de su cabeza salió una película, Punch-drunk love, que le ha valido a Adam Sandler la consideración de mejor actor, y también ha visto premiado el texto del filme con el premio al mejor guión. De entre las dos máximas ganadoras, ninguna se hizo con el premio a la dirección, que fue a parar a manos del alemán Iain Dilthey por su obra El ansia. En un festival que contaba entre el jurado con la presencia del actor Adrià Collado junto a Berta Sichel, Chris Fell, Sanne Pedersen, bajo la presidencia de Javier Maqua, se concedieron también los premios Gil Parrondo a la Mejor Dirección Artística para Daniel Bardford por The good girl, Especial del Jurado para Abderrahmane Sissako, por Waiting for Happines, y premio al mejor cortometraje para Am see, de Ulrike von Ribbeck.