Esta web contiene cookies. Al navegar acepta su uso conforme a la legislación vigente Más Información
Sorry, your browser does not support inline SVG

TINA OLIVARES

"El ciudadano tiene que entender que la cultura cuesta dinero"

Fotografía
Por Sofía BarrantesTiempo de lectura8 min
Cultura10-12-2017

Tina Olivares usa pantalones amarillos y deportivas rosas al entrar en el número 37 de la calle Argumosa de Madrid. Allí tiene su escuela de cine. "Me apetece tomar un café", es lo primero que dice tras saludar. Así comienza su día y se dirige al pequeño local al lado del 37 donde ya saben cómo pide su café y saluda a la camarera como a una vieja amiga. Es independiente como su película Esperando septiembre, vive comprometida con el arte y sus convicciones la han llevado a convertirse en productora.

¿Cómo te ha cambiado la vida producir una película sin subvenciones?

Radicalmente, porque yo era guionista de televisión, una guionista más de todos los que somos en Madrid. A nivel profesional, cambió el rumbo de mi trayectoria, poco a poco me convertí en una productora y ahora estoy produciendo para televisión. A nivel profesional, me dio mucha seguridad porque fue como cazar el mamut, fue ser capaz de sacar con mis propios medios y recursos una película independiente que es un esfuerzo enorme.

Has dicho que Esperando septiembre es un poco autobiográfica...

Autobiográfica no es la palabra, pero está basada en mi vida y en la de mis amigos. Se estrenó en 2011 en plena crisis, cuando mucha gente estaba en paro. Esta película cuenta la historia de cinco amigos que les sobrepone la crisis económica de modos diferentes y cómo la entrada de 20 millones de pesetas modifica su relación de amistad. Lo que yo hice fue coger a 5 personas que estaban en mi círculo cercano, actores, que les propuse diseñar su personaje. Ellos se inspiraron en cosas que les preocupaban. El conflicto interno de cada personaje era algo que compartían con el actor. Cada uno, de su inquietud sacó a su personaje. La protagonista tiene cosas de mi vida...

¿Tú la diseñaste?

La diseñamos entre la actriz, Natalia Erice, y yo.

También has dicho que te quedabas sola en Madrid esperando septiembre cada verano, ¿sigue siendo así?

Sigo quedándome en Madrid en los veranos, pero claro, septiembre es una fábula, es ese momento donde todo baila... La verdad es que estoy ya en septiembre porque varias cosas están yendo bien. Ya no espero, ya llegó el mes y estoy viviéndolo.

¿Por qué no esperaste una productora para Esperando Septiembre?

Impaciencia. Lo deseaba. Saqué la película en un año, con una productora quién sabe en cuánto la habría sacado. También fue por desconfianza en el sistema, tenía que escribir un guión y esperar a que alguien se lo leyese de una pila de guiones, que a alguien le gustase, que lo quisiesen producir y mi inseguridad también me hizo pensar: "¿quién soy yo para pedirle a alguien que ponga 2 o 3 millones de euros sobre la mesa para producir mi película?"

¿Cómo costeaste a los actores?

No cobraron y yo tampoco, para autoproducirte a un nivel tan pequeño tienes que buscar personas que se sientan pagadas con la experiencia. Eran actores de teatro con ganas de experiencia audiovisual, entonces les compensaba hacer la película. Fue así con una parte del equipo, otra no, otros cobraron. Lo que me parece muy importante a la hora de autoproducir es tener en mente que puedas producir lo que quieras producir, me explico: que no te metas en cosas que no te puedas pagar, no puedes morir en el intento porque te va a frustrar tanto que no vas a poder seguir tu trayectoria.

¿Qué fue lo más difícil de autoproducir?

Vender.

¿Y lo que más disfrutaste?

El trabajo con los actores. Era como pintar un cuadro. En un rodaje usualmente el director está alejado de los actores, pero esta vez éramos los actores y yo. Yo era la camarógrafa de la película, yo era una artista en contacto intimo con su obra, el lienzo eran los actores.

"Tal vez en otros oficios tendría mayor estabilidad económica"
MOTIVACIONES Y PRODUCCIONES

¿Qué te motiva a seguir trabajando en el cine a pesar de la situación de este arte en España?

Es una buena pregunta y me lo pregunto muchas veces porque tal vez en otros oficios tendría mayor estabilidad económica. En este oficio no paro de trabajar, sin embargo siempre tengo una incertidumbre económica. Yo creo que esto es ser una artista, no puedes dejarlo, no es racional.

¿Cómo crees que se puede cambiar esto?

Primero es el ciudadano el que tiene que apoyar la cultura y entender que la cultura cuesta dinero. España es un país en el que en general, desde las instituciones, no se apoya la cultura, se hace lo mínimo. El dinero de subvenciones para producciones lo dan a posteriori, los 20 mil euros que cuesta hacer un cortometraje, te los dan meses después. Tienes que tener músculo económico. Aquí ser un artista no es tener un trabajo. Incluso siendo un artista premiado, necesitas tener músculo financiero para poder producir.

¿Cuál es la producción en la que más te ha gustado participar?

Mi primer trabajo como guionista en el 2000,  en una serie que se llamaba Ciudad sur, era la adaptación española de un éxito argentino llamado Campeones. Iba sobre boxeadores y fue una aventura porque busqué dónde entrenaban los boxeadores en Madrid y me puse a entrenar también. Fue una conexión bonita porque los boxeadores de esa escuela fueron los entrenadores de los actores de la serie. Después todo el equipo de producción de la serie nos hicimos amigos, hasta fueron a mi cumpleaños.

"Todo se acomoda al estar tranquilo en el oficio, hay que tener paz en el trabajo"

¿Qué es lo que más te ha impactado de lo que has estudiado?

Creo que solo se aprende lo que se necesita: yo soy auditora contable de profesión, no sé por qué estudié eso, nunca utilicé los conocimientos de auditora hasta 20 años después cuando hice mi película. Algo a lo que no le di importancia al principio, tomó sentido después. Nuestro sistema de aprendizaje está erróneamente diseñado porque pensamos que es memoria a corto plazo y no nos orientamos por observar, analizar y deducir, al final eso es lo que realmente nos va a servir en la vida. Nadie nos enseña a observar, nos enseñan a aprobar exámenes. El programa que estoy produciendo ahora es educativo y va de esto: de aprender desde la observación. Aprendo más haciendo que con estudios.

ASPIRACIONES Y AFICIONES 

¿Qué aspiras en el futuro personalmente?

Vivir con calma el oficio, a disfrutarlo porque llega un momento en el que el estrés es tan fuerte que se te olvida disfrutar... Todo se acomoda al estar tranquilo en el oficio, independientemente de la familia y los amigos, hay que tener paz en el trabajo. Quiero recibir y dar amor.

¿A quiénes admiras dentro del cine español?

Admiro a Adrián Guerra, productor de El guardián invisible, Grand Piano, Luces rojas y otros 'peliculones', creo que es muy inteligente, pues siendo muy joven, con 26-28 años, montó una productora y ha producido de las películas mas grandes de este país. Admiro a todos los actores de nuestro país porque es muy difícil actuar, es difícil seguir en ese oficio a lo largo de los años, es difícil esperar una llamada y a todos los demás, porque este oficio es para gente muy fuerte.

¿Qué otras pasiones tienes además del cine?

Me gustan mucho los animales, no puedo tenerlos por mi estilo de vida, pero yo quise ser veterinaria.

¿Cuál dirías que es el soundtrack de tu vida?

Many rivers to cross de Jimmy Cliff. Esta canción ha sonado cada vez que he tomado una decisión importante: cuando decidí irme a vivir a EEUU con 23 años, en el taxi hacia el aeropuerto, sonó y ahí fue cuando me di cuenta de que esa canción había sonado antes en mi vida en momentos importantes y recientemente ha sonado también (empieza a cantar la canción). 

Si tuvieras que elegir solo 3 películas para ver por el resto de tu vida, ¿cuáles serían?

Esta pregunta es muy difícil si tuviera que elegir, escogería una película de mi infancia: Los Goonies, porque despertó en mí esa semilla de aventura. Una de mis 20 años: Gringo viejo o El silencio de los corderos, y una actual diría que: Lalaland porque este año la disfruté un montón, pero igual dentro de un mes cambiaría de película. Es que también Blade Runner —la original, no la de ahora— y una española sería Lisboa. ¡Esta pregunta es muy difícil, más difícil que producir una película!

Si pudieras hacer una película sobre un libro ¿cuál sería?

Me encanta Todos los nombres de Saramago, porque daría lugar a una película muy poética pero muy lenta. Hay un libro que leí en mi adolescencia que daría una trama fantástica de thriller llamada No digas lo que hice ayer pero ahora mismo no me sale el nombre de la autora...

(Pone la canción de Jimmy Cliff en el móvil y la canta)

¿Te suena esta canción?

Me gusta la letra...

Es preciosa.